El barco de la Pelitrúmpeli arriba a las librerías valencianas de la mano de la Asociación Cultural Moixama para entretener y a la vez divulgar el costumbrismo de los pueblos de la Comunitat Valenciana. Esta revista infantil, creada por un grupo de ilustradores valencianos, debe su nombre al disco de Vicent Torrent, editado por Al Tall, en el que se recogían las canciones populares de diversos municipios valencianos. Como en la obra musical, la publicación tendrá como eje vertebral un cómic en el que esta embarcación voladora, cuya tripulación son niños y niñas con ganas de aventuras, recorrerá la geografía valenciana conociendo la cultura y tradiciones de cada uno de sus municipios.

Al frente de esta revista que promueve la lectura en valenciano, está David Carboneras, licenciado en Bellas Artes y componente del grupo musical Ovidi Twins. Junto a él se encuentran los dibujantes Jesús Huguet y Víctor Santos, miembros del colectivo Siete Monos, un grupo de historietistas valencianos creado en la década de los 90. Así como, Dani Miquel, un contacançons y Didac Botella, escritor de teatro, quienes también forman parte del grupo de nueve personas que colaboran en este trabajo, todos valencianos. "En Valencia hay una tradición de cómic ancestral y hay ilustradores muy válidos por eso hemos querido aprovechar a la gente de aquí", destacó David Carboneras.

"Hemos intentado encontrar el equilibrio entre el entretenimiento y la educación, que haya una calidad gráfica buena y que los contenidos sirvan tanto para entretener como para enseñar", explicó el director de la publicación. "Nuestro objetivo es que el niño o niña que se acabe de leer la revista tenga las mismas ganas de leer un libro infantil que de jugar a la 'Play'", apuntó Carboneras. "No se trata de decir que la videoconsola es mala, sino que juegue a la 'Play' y que lea también, que vea que cada una sirve para unas cosas".

Respecto a los valores que transmite la revista en sus viñetas e historias, Gabriel Sendra, conocido editor valenciano, destacó que no se rigen por los estereotipos que preocupan a otras publicaciones. "Estos cómics no tienen las etiquetas de Disney, el de la chica delgada y guapeta y el chico que tiene que ser de tal forma", aclaró Sendra. "Nosotros no estamos obsesionados en ese sentido. No tenemos problemas en que el día de mañana salga un cómic de un niño con padres homosexuales".

"El mejor filtro de calidad es el niño que cada uno de nosotros llevamos dentro", argumentó Carboneras. "Tenemos muy presente nuestra infancia y si al niño que tenemos dentro no le gusta no lo sacamos", añadió. "La revista está pensada para niños de entre seis y 13 años, estudiantes de Primaria", por ello "intentamos que haya textos para niños tanto de seis años como para uno de doce".

Del juguete de Ibi al reloj de Otos

En cuanto a la distribución, los promotores de la idea explicaron que la revista sólo llegará a las librerías, ya que, según argumentan, "la distribución en los quioscos es complicada y nuestro producto va a un público determinado". Además, "nuestra intención es darle un detalle de calidad más que una simple revista, no hacemos algo para que esté al lado de la Barbiebook", confesó Sendra.

La Pelitrúmpeli apuesta por la sección local, "por acercar cosas nuestras, de los pueblos valencianos". En su primer número se habla de los juguetes de Ibi y en el segundo habrá un cómic sobre los relojes de sol de Otos.