­A partir de hoy, los partidos que concurren a las elecciones del 22 de mayo celebran sus mítines centrales. Aunque muchos analistas coincidan en que las campañas electorales «cada vez tienen menos sentido por la dinámica de los partidos políticos de estar 24 horas, los 365 días del año, en campaña permanente», estos actos principales son los más trabajados y en los que los responsables de campaña no dejan nada sin atar.

Cada partido tiene su metodología, sus trucos, su plan de acción para llevar adelante sus campañas y manejar todo el flujo de información y propaganda electoral sin fisura alguna. En el caso del PPCV, «funcionamos a dos niveles: por un lado están los actos municipales y comarcales, donde damos carta blanca a las agrupaciones para que sean ellas los que los monten». No obstante, fuentes populares precisan: «en el caso que a los actos acudan representantes de primer nivel como Antonio Clemente, Alfonso Rus, Paula Sánchez de León, Francisco Camps o alguno de sus consellers la trasera (decoración del escenario) la ponemos desde el partido regional». El PP resume su actuación electoral en que «toda la organización de los actos dependerán del número de personas que acudan, de los representantes políticos y si hay que dar señal a los medios».

En el caso del PSPV, hay colaboración pero no libertad para las agrupaciones locales, «tenemos una imagen de campaña que distribuimos a nuestras agrupaciones para que monten sus actos, además, les mandamos manuales de estilo, dos para la precampaña , y otro dos para la campaña principal, donde se explica todos los pasos a seguir para montar los mítines». Fuentes socialistas apuntan: «trabajamos conjuntamente con las agrupaciones, ellos son los encargados de buscar los sitios que mejor se adecuen y más económicos sean. Por nuestra parte, siempre que acuda Jorge Alarte somos nosotros los que ponemos la imagen, ya que la trasera siempre es la misma».

Otro partido que utiliza una infraestructura doble para organizarse es la coalición Compromís (Bloc, Iniciativa y Els Verds), «trabajamos a dos niveles, los actos importantes, los nacionales (País Valenciano), los organizamos desde la coordinadora. Llevamos la trasera y somos nosotros los que lo montamos todo, las luces, la megafonía y todo lo necesario, siempre teniendo en cuenta los presupuestos. En cambio, los actos municipales y comarcales los montan los colectivos locales». Compromís señala que los actos comarcales y municipales están supeditados a los nacionales por lo que «nunca puede haber un acto comarcal o municipal cuando haya alguno nacional».

Por su parte, Esquerra Unida del País Valencià (EUPV) va por libre en su modus operandi. Esta formación se centra únicamente, y de lleno, en los actos comarcales y municipales ya que los actos centrales los gestiona la caravana de Cayo Lara. Fuentes de Esquerra Unida tiene claro cuáles son las premisas que ha de cumplir un lugar para ser escogido: «ha de ser conocido y tener una buena accesibilidad». EUPV añade: «otro punto importante cuando se organizan los actos es saber, más o menos, cuánta gente va a venir. Nunca podemos escoger un lugar que se quede corto porque la gente no cabe y se vuelve disgustada a su casa (una vez nos pasó), ni tampoco un local donde nos quedemos largos porque se ven huecos vacíos y da una impresión de pobreza».

Mítines centrales, cosa de Madrid

Todos los partidos tiran mano del hermano mayor, el partido a nivel estatal, para montar sus principales actos por cuestiones de eficiencia, ahorro y presupuestos, menos la coalición Compromís, que se lo guisa todo en casa.

Los nacionalistas declaran que no pueden realizar los mismos despliegues mediáticos que hacen el PP o el PSPV porque «no tenemos Gürtel que nos lo monte» y «es inasumible a nivel económico para nosotros y más, con la nueva ley de financiación». Compromís ha optado por realizar su acto principal, mañana, en el Palacio de Congresos ya que se adecua mejor a sus «necesidades» y, además, tienen muchas ventajas: «la iluminación, la megafonía, el seguro para actos públicos, etc., está todo ya predispuesto y listo para usarse». «Nosotros sólo tenemos que montar las traseras y así, podemos dedicarnos a lo que verdaderamente importa: movilizar a la gente». EUPV pondrá todo su empeño en la movilización de su electorado para que acudan al acto central de mañana, en el polideportivo del Cabanyal, tirando de «trabajo militante, es decir, enviando cartas, correos electrónicos y con Facebook y Twitter, ya que no tenemos el dinero para hacer publicidad». El funcionamiento de la comitiva de Cayo Lara es claro y directo: «la caravana electoral está formada por tres patas, el autocar de los medios de comunicación, otro que es la avanzadilla que se encarga de montar las infraestructuras de los mítines y por último, el de Cayo con sus pocos asesores y el coordinador de campaña». En el caso del acto que se celebrará en Valencia, IU señala que «nuestros mítines no son como los macroactos del PP y PSOE, no llevamos grandes graderías ni cortinajes que esconden el fracaso de asistencia que existe en estas citas hechas a la americana».

En el caso del PP, fuentes de Génova explican que «el principal objetivo a la hora de montar los mítines es que queden bien. Para ello, se realizan estudios previos con profesionales para ver dónde tienen que ir las cámaras, los puntos de vista que se van a coger y la imagen que se va a dar a los medios». Los populares señalan que «el partido regional es el encargado de llenar el mitin y movilizar a todo el electorado, el montaje del escenario, luces y realización lo llevamos desde Madrid con dos caravanas electorales porque sino sería imposible llegar a toda España». Sin embargo, el PP confiesa que «no tiene mucho misterio el montaje, en gran parte depende del juego que dé el lugar, si puedes poner cámaras altas o hacer visiones aéreas, obviamente, quedará mejor». Por su parte, el PSPV no ha querido responder a las preguntas de este periódico.