Las protestas pacíficas protagonizadas por el colectivo de "indignados" del 15-M frente a Les Corts Valencianes se han disuelto a lo largo de la jornada hasta desaparecer por completo, de forma que los diputados han abandonado esta tarde el hemiciclo con total normalidad tras la sesión de investidura.

El punto más álgido de las protestas se ha producido alrededor de las 10 horas, justo una hora antes del inicio de la actividad parlamentaria, cuando algo más de un centenar de "indignados" se han concentrado en los accesos de las calles Navellos y Libertad, junto a las entradas a Les Corts.

Tras guardar tres minutos de silencio por los casos de corrupción que afectan a los políticos y mostrarles unas "tarjetas rojas", los manifestantes han permanecido durante hora sentados en el suelo, mostrando pancartas con lemas como "ReCortes Valencianas" y coreando otros como "no tenemos pan para tanto chorizo".

La llegada de los diputados al hemiciclo se ha producido sin incidentes, dado que los "indignados" han dejado pasillos para que cualquier peatón pudiese pasar, aunque el perímetro de seguridad y el intenso despliegue policial apenas ha permitido el contacto, siquiera visual, entre manifestantes y políticos.

Únicamente algunos representantes de entidades empresariales, como el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Rafael Aznar, el de la Cámara de Comercio de Valencia, José Vicente Morata, y el de la patronal autonómica Cierval, Rafael Ferrando, han sido abucheados y han recibido insultos por parte de algunos de los concentrados.

Sus acciones, sin embargo, han sido reprimidas por el resto de "indignados", que les han recordado que ayer se acordó en asamblea que únicamente se iba a expresar rechazo en silencio y mostrando tarjetas rojas.

El receso del mediodía ha marcado el inicio del declive de las concentraciones, ya menguadas por el intenso calor y las escasas zonas de sombra.

Alrededor de las 14.15 horas, el grupo mayoritario ha decidido marcharse a comer para regresar a las 16.15, una vez se retomase el pleno de investidura, pero muchos de los "indignados" ya advertían que no iban a regresar, como así ha sucedido.

Pese a que en las redes sociales el colectivo "Acampadavalencia" había convocado de nuevo a la concentración, finalmente solo han acudido alrededor de una decena de "indignados", que se han sentado en el suelo durante una hora aproximadamente y apenas han alzado la voz.

Con todo, el dispositivo policial se ha mantenido en las mismas dimensiones que a primera hora de la mañana, con agentes de Policía Nacional llegados de diversos puntos de la Comunitat Valenciana y policías locales.

El perímetro de seguridad únicamente se ha abierto a los peatones durante unos instantes coincidiendo con el receso en el interior de Les Corts para comer, de forma que el paso por la calle Navellos ha estado cortado durante toda la jornada.

La presencia policial en las inmediaciones de Les Corts se hizo visible en la tarde de ayer, cuando la Policía Nacional colocó vallas en la plaza de San Lorenzo para impedir que los "indignados" acampasen frente al hemiciclo, tal y como habían anunciado.

Este dispositivo se ha ampliado a lo largo de la noche hasta cortar el paso prácticamente en toda la calle Navellos, hecho que ha provocado las quejas que los comerciantes de la zona, que se plantean la posibilidad de presentar reclamaciones por las pérdidas sufridas, que ascienden en algunos casos a más de 600 euros, según han indicado.

Insultos a Morata y Aznar

Parte del colectivo ha insultado y perseguido a varios empresarios que han abandonado la cámara a mediodía, mientras otros se lo han recriminado.

Alrededor de las 14 horas, el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Rafael Aznar, y el de la Cámara de Comercio de Valencia, José Vicente Morata, han sido insultados y perseguidos durante unos metros por un grupo de "indignados" a la salida de Les Corts.

Instantes antes, el presidente de la patronal valenciana, Rafael Ferrando, también ha sido abucheado por este mismo colectivo.

Estas acciones han despertado el rechazo del resto del grupo de concentrados, que han recriminado su comportamiento a quienes han insultado y perseguido y les han recordado que la forma adecuada y aprobada ayer en asamblea para protestar es en silencio y mostrando una tarjeta roja al paso de los políticos.

Tras los empresarios, han pasado junto al grupo de 'indignados' varios políticos, como la secretaria autonómica de Deporte, Niurka Montalvo, el concejal del Ayuntamiento de Valencia Ramón Isidro o el síndic de Greuges, José Cholbi.

Alrededor de las 14.15 horas, este grupo de manifestantes ha acordado marcharse a casa hasta que se reanude la actividad en Les Corts por la tarde.

Por una protesta pacífica

La organización del Movimiento del 15-M en Valencia ha lanzado esta mañana un grupo de directrices con la intención de coordinar las protestas y evitar los incidentes. Las ocho recomendaciones incluyen que durante la protesta los manifestantes se situarán a dos metros del cordón policial y de ellos, se recomienda que al menos las cuatro primeras filas permanezcan sentadas.

1. Todo el mundo sentado o al menos las 4 primeras filas.

2. Nos situamos aproximadamente a dos metros del cordón policial.

3. En cada hora en punto realizaremos 5 minutos de silencio e intentaremos hacerlo con cada político. sacando una tarjeta roja.

4. Quien quiera puede quedarse en ropa interior bajo el lema "los políticos nos están dejando en bolas".

5. Hay que intentar no cortar calles.

6. Habrá grupos de coordinación (su función será la de coordinarse entre los 3 puntos y ayuda en el buen funcionamiento de la acción) en tres puntos: casa caramelos, plaza de la virgen, c/ libertad

7. No hay que arrojar nada, ni siquiera papel, ya que puede ser malinterpretado.

8. Todo lo que tiremos al suelo será recogido después.