Uno de los hombres fuerte del nuevo Consell, por el elevado presupuesto que manejará, será Luis Rosado, que pasa de ser secretario autonómico de Sanidad y gerente de la Agencia Valenciana de Salud, a asumir la cartera dejada por Manuel Cervera. Hace apenas tres años, Rosado tuvo que renunciar a su plaza de Medicina Intensiva que logró ante un tribunal para el Hospital General de Alicante al considerar «poco estético» el hecho de haber recibido la calificación dos meses antes de que fuera nombrado secretario autonómico de Sanidad.

El nuevo conseller de Sanidad logró la mejor puntuación de la prueba en el concurso de traslados creado desde la Agencia Valenciana de Salud que estaba a punto de dirigir. Encabezó la lista de aspirantes con una puntuación de 86,50 puntos y, además, mostró la mejor experiencia para obtener el puesto. En su renuncia, Rosado aseguró que algunos médicos podían pensar que había obtenido la mejor puntuación por su condición de alto cargo, o que algunos miembros del tribunal que lo evaluó habrían estado presionados para puntuarle mejor que al resto de aspirantes.