Apadrine a una familia valenciana empobrecida por 300 euros al mes. Le ayudará a pagar el alquiler, o los recibos de la luz y el agua, o tal vez le permita comprar la comida y la ropa básica para los niños. El compromiso mínimo con la familia en dificultades económicas es de un año. Es decir: la ayuda final ascenderá a 3.600 euros. Se buscan, sobre todo, empresarios concienciados y particulares pudientes. Ellos podrán elegir, de entre una lista de perfiles colgada en internet, la familia concreta a la que prefieran ayudar.

De este modo suena la innovadora campaña solidaria que va a poner en marcha la Gran Asociación de Beneficencia de Valencia. La entidad, fundada en 1853, ha querido personalizar la ayuda solidaria y ha promovido esta fórmula ya conocida para el Tercer Mundo pero poco común en España: apadrinar a una familia concreta. Y lo harán de una forma sofisticada. El dinero no llegará directamente a la familia, sino que la ONG -de ideario católico- hará de intermediaria. El apadrinado llegará a la sede de la Gran Asociación con los recibos que tenga que pagar (luz, agua, gas, alquilerÉ), y la ONG los pagará directamente con los fondos del padrino sin que el dinero haya de pasar por las manos del interesado. Si se trata de comida, la entidad entregará a los apadrinados unos vales para que los canjeen en los supermercados por alimentos de primera necesidad (así figura en los convenios con dichos establecimientos). Y si se trata de ropa o electrodomésticos básicos, la compra se justificará con recibos para probar que no se ha derrochado el dinero.

Todo ello busca "evitar la picaresca" y dar la máxima "seguridad" a los donantes, según recalca el presidente de la Gran Asociación, Fernando Musoles. Las familias beneficiarias serán seleccionadas por la ONG atendiendo a la prioridad de sus necesidades. "Por lo general -precisa Fernando Musoles-, serán ancianos con pensiones no contributivas sin hijos; o madres separadas con hijos que no pueden cubrir las necesidades familiares; o familias enteras donde no entra ni un sueldo y se les ha acabado el subsidio. En definitiva, personas que lo estén pasando mal".

Ya hay 5 padrinos comprometidos

Aunque la campaña "Apadrina una familia" será presentada de manera oficial el próximo 6 de julio en una cena benéfica, la Gran Asociación ya ha conseguido el compromiso de cinco padrinos que asumirán el pago de esos 300 euros al mes, durante un año, a una familia concreta. Ahora, la Gran Asociación está elaborando el catálogo de familias necesitadas que ofertará -sin nombres ni apellidos, sólo el perfil- en su página web durante los próximos días.

Antes de incluir a una familia en la lista de apadrinables, los asistentes sociales de la Gran Asociación de Beneficencia comprueban la documentación de los solicitantes y su situación real.

Una vez se formalicen las parejas de benefactores y beneficiarios, está previsto que los padrinos puedan conocer a sus apadrinados si así lo desean. O al revés, si no hay inconveniente en ninguna de las dos partes. "Así podrán ver el rostro y la situación de la persona que les ayuda o a la familia a la que están ayudando", añade Musoles.

Los interesados en el programa pueden presentar su solicitud en la sede de la entidad (Carrer Cavallers, 10, en Valencia). Pero la Gran Asociación ya adelanta que, en cumplimiento de sus estatutos, tendrán "prioridad" las familias de la ciudad de Valencia. Aquellas personas que quieran ayudar pero con cantidades menores, pueden ofrecer ayudas puntuales para pagar un determinado recibo de una familia.