De continuar la situación como hasta ahora "llegaremos a un número catastrófico" de odontólogos parados, manifestó ayer el presidente del colegio oficial de Valencia, Enrique Llobell, quien planteó que en la Universidad "se están formando a parados".

Llobell explicó que por cada odontólogo que se jubila hay diez licenciados. "Si en el año 2010, en toda Italia se han admitido 700 nuevos alumnos para cursar Odontología, ¿cómo puede ser posible que sólo en el primer curso de la de Valencia hay 310 matriculados?" se preguntó a la vez que valoró el "escaso sentido" que tiene mantener un numerus clausus tan restrictivo en las facultades de Medicina, habiendo carencia de médicos en el sistema sanitario español, como lo tiene saturar el mercado laboral con un número de titulados en Odontología que "el mercado no podrá absorber" apuntó.

Otras cuestiones de las que advirtieron desde el Colegio Oficial de Odontólogos de Valencia son determinadas prácticas profesionales y la política universitaria.

"Somos profesionales y no nos dedicamos al negocio pero sí es cierto que se negocia con nosotros a través de las franquicias y las universidades privadas que hacen caja" manifestó Llobell quien denunció que en algunas de esta clínicas "se realizan sobretratamientos y se trabaja en precario".

Por eso, el secretario de la entidad, Carlos Borrás, pidió de la Conselleria de Educación que "ponga filtros en el acceso a esta carrera".

Otro ejemplo de la delicada situación laboral del colectivo está el propio colegio donde sólo en los últimos seis meses del año, se han inscrito 101 colegiados en su bolsa de trabajo.