El Tribunal Supremo ha reconocido el derecho de asilo del hijo de la opositora guineana Regina Mañe, que es la ministra de Educación en el exilio y que vive en Valencia desde hace quince años. El Gobierno rechazó conceder el estatuto de refugiado al demandante porque consideraba que no estaba acreditado que sufriera una persecución política por ser hijo de Regina Mañe. El Supremo entiende que sí puede estar en riesgo su integridad. El hombre tuvo que regresar hace dos años a su país ante la tardanza de los tribunales en resolver el asunto, según lamentó ayer su madre.

Regina Mañe tuvo que huir de Guinea Ecuatorial tras ganar por mayoría absoluta las elecciones municipales en 1995 en Bata, la segunda ciudad del país. "El actual presidente, Teodoro Obiang, le entregó la alcaldía a uno de sus colaboradores y tuve que salir del país por seguridad. Llegué a España en 1997 y poco después me instalé en Valencia", precisó ayer Mañe.

El Gobierno en el exilio de Guinea Ecuatorial, que está presidido por Severo Moto, nombró a Mañe ministra de Educación en 2003. El primogénito de la líder de la oposición -que se quedó a vivir en Guinea- se sintió amenazado tras el nombramiento de su madre como ministra de Educación y pidió al Gobierno de España que le concediera el asilo.

Interior denegó el derecho de asilo al demandante porque estimó que no había probado que estuviera siendo perseguido. El Supremo advierte de que "dadas las circunstancias sociopolíticas existentes en Guinea", el hijo de Mañe puede estar "en una situación de riesgo" que justifican la concesión del derecho de asilo. Regina Mañe cree que es complicado que su hijo vuelva a España porque está al frente de una empresa y, de momento, ha logrado pasar desapercibido.

"Era complicado seguir allí"

Regina Mañe explicó que su hijo decidió volver a su país hace dos años porque ya no esperaba que le concedieran el derecho de asilo. La líder opositora, que pertenece al Partido del Progreso, aseguró: "Yo no tuve más remedio que instalarme en España porque era complicado seguir allí. Desde el Gobierno en el exilio trabajamos para volver a Guinea, pero es difícil. En catorce años no he podido volar a mi país". Mañe declaró que a ella el asilo se lo concedieron "a la primera" y confesó que no entiende porque el Ministerio del Interior puso tantas trabas para otorgarle el derecho a su hijo. La dirigente política afirma que no sabe nada del supuesto golpe de Estado que se planeó en España y del que fueron intervenidas armas cuando estaban siendo embarcadas en Sagunt. En Valencia viven otros dos ministros en el exilio.