El magistrado ha rechazado la pretensión del PSPV, que ejerce la acusación popular, de juzgar al jefe del Consell y al resto de los acusados por un delito de cohecho activo. Los socialistas acusaban a los imputados de haber influido en las adjudicaciones. El abogado del PSPV reclamaba tres años de cárcel y ocho de inhabilitación para Camps y los otros tres imputados.

Sin embargo, el juez Flors recuerda en el auto que la "supuesta irregularidad jurídico administrativa de los contratos" adjudicados a Orange Market "no ha sido materia de este procedimiento". La consecuencia es que los acusados no pueden acabar condenados a penas de prisión ni ser inhabilitados. El delito por el que finalmente han sido acusados sólo contempla penas de multa.

El TSJ va a designar en los próximos días al magistrado Juan Climent como presidente del jurado popular. Climent es el único de los cinco jueces de la sala de lo Civil y Penal del TSJ que no ha participado hasta ahora en la causa de los trajes. Climent dictará un auto en el que señalará los hechos objeto de juicio y fijará la fecha de la vista. A partir de ahora, la sala del jurado va a seleccionar a las once personas que integrarán el tribunal popular. Nueve formarán el jurado y dos serán suplentes.