El juez instructor le dio a Vicente Sanz 24 horas para que depositara una fianza de 30.000 euros, con el fin de garantizar "las responsabilidades pecuniarias que puedan declararse pertinentes". Y el encausado procedió. No con dinero en metálico sino con bienes. El exdirectivo de Canal 9 entregó como aval los títulos de propiedad de nueve fincas rústicas inscritas en los registros de Nules y la Vall d'Uixó y valoradas catastralmente en 38.000 euros, según explicaron a este diario fuentes judiciales. Varios de esos terrenos agrícolas se corresponden con huertos de naranjos, como comentó el propio Sanz en el juzgado. Y al menos uno se encuentra en el término municipal de Moncofa, que no tiene oficinas del Registro de la Propiedad propias.

El juez dio, obviamente, por buena la garantía de fianza al superar en 8.000 euros la cantidad exigida. Se da la circunstancia de que la cantidad de la fianza coincide precisamente con la cifra que un juzgado de lo social impuso a RTVV como indemnización a Vicente Sanz por haberle despedido en mayo de 2010, tras abrirle un expediente disciplinario por "falta muy grave" cuando se vio que la causa, lejos de archivarse, evolucionó de acosó a abuso sexual. El 23 de febrero de 2010, Sanz fue suspendido cautelarmente de sus funciones, de mutuo acuerdo con la dirección de RTVV. La jueza de lo social entendió que se le debía compensar por los tres meses en los que había estado supustamente en el dique seco sin trabajar y otros tres correspondientes a la indemnización estipulada por el cese del contrato de alta dirección.

Cobraba más que Camps

Las dos partes han presentado recurso ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) valenciano, que aún no ha resuelto. Sanz reclama 120.000 euros, en concepto de derechos adquiridos en sus 15 años en RTVV, pero la cadena pública alega que el derecho a indemnización en los contratos blindados se extinguió en agosto de 2009 cuando José López Jaraba llegó a director general. Además, el ente público pide que se rebaje en 15.000 euros la indemnización, ya que Sanz no estuvo sin sueldo porque pidió la incorporación a la plaza de técnico laboral en RTVV que tiene en propiedad por oposición desde 1989. De momento, Sanz no ha cobrado un euro a expensas de que se resuelva el litigio en los tribunales.

Como alto directivo de Radiotelevisió Valenciana cobraba más de 70.000 euros anuales. Catorce pagas de 5.000 euros brutos. Más que el presidente Camps.