Los ornitólogos y los degustadores del paisaje y la naturaleza están de enhorabuena. Miembros de la Sociedad Valenciana de Ornitología (SVO) están siguiendo este verano las evoluciones de una pareja de carracas (Coracius garrulus) que ha nidificado por primera vez en en una zona situada entre el Camp de Túria y la Serranía.

Se trata de un pájaro de unos 30 centímetros de longitud cuya observación resulta siempre espectacular debido a sus vistosos colores. Aunque en muchos aspectos es similar a otras especies como el Martín pescador, el Abejaruco o la Abubilla, su color azul celeste y verde esmeralda, en contraste con el negro de sus alas y con el dorso marrón lo hacen un pájaro único y fácilmente identificable cuya visión no se olvida con facilidad.

Según la Sociedad Valenciana de Ornitología (SVO), las carracas frecuentan zonas esteparias, llanos cerealistas y campos de cultivo de secano, donde se alimentan de insectos, además de lagartijas, ranas e incluso ratones si disponen del tamaño adecuado y carecen de otros recursos. Para anidar prefieren las construcciones humanas, huecos de árboles, taludes arcillosos y otras oquedades que ocupan o construyen.

Su canto es una sucesión rápida de notas cortas similar al instrumento infantil del que recibe el nombre: la carraca.

Fuentes de la SVO destacaron la excepcionalidad del hallazgo. Aunque pasa los veranos en la Comunitat Valenciana tras un invierno en el cono sur de África, la carraca había silo localizada como ave nidificante en el el sur de la Comunitat Valenciana, con unas pocas parejas nidificantes en Alicante. Solo en los periodos migratorios es posible verla posada sobre los cables de tendido eléctrico y/o telefónica antes de iniciar su migración o a su regreso.

Nuevas citas

Sin embargo, la Carraca o "Cavaller", en valenciano, se ha instalado en un área de cultivos de secano en el límite entre las comarcas de Camp de Túria y la Serranía, en un área comprendida entre los términos municipales de Villar del Arzobispo, Losa del Obispo, Lliria, Chulilla, Casinos y Bugarra.

Según la SVO, en su localización y posterior seguimiento ha sido "fundamental" la colaboración de vigilantes forestales, guardias rurales y fotógrafos de la naturaleza, que comunicaron su hallazgo a expertos de la SVO y también "al propietario de la vivienda" donde están anidando las aves y que desconocía esta circunstancia.

Toni Polo, portavoz de la SVO, destaca que una vez conocida la presencia de la carraca, el propietario ha actuado "con absoluto respeto por las aves y en colaboración con esta asociación".

Los ornitólogos creen que el asentamiento de esta nueva especie en la provincia de Valencia puede deberse a la disponibilidad de hábitats adecuados- existe en la zona de cría un mosaico de cultivos de secano con almendros, olivos y vides muy adecuados para la carraca- y a que no se producen en la zona tratamientos fitosanitarios "excesivos" que sí existen en otras zonas de regadío.

Miembros de la Sociedad Valenciana de Ornitología no descartan la posible existencia de algunas parejas más en zonas próximas y se plantean favorecer la reproducción de la especie mediante la colocación de cajas-nido similares a las que se emplean en Extremadura o Andalucía con este fin.