Deja la presidencia del partido y seguirá de diputado

j. g. g./f. A. valencia

La marcha de Francisco Camps no tiene retorno, al dejar la presidencia de la Generalitat pero también la del partido. Tanto el máximo puesto institucional de la C. Valenciana como el liderazgo del PPCV recaerán en el hasta ahora alcalde de Castelló, Alberto Fabra. El jefe del Consell seguirá como diputado, lo que garantiza -junto con Ricardo Costa, también parlamentario autonómico- el fuero y que el caso no salga de la sala de lo civil y penal del TSJCV. Alberto Fabra fue el número uno por la circunscripción de Castelló en las elecciones autonómicas del 22-M, que no hace ni dos meses revalidaron la presidencia de Camps.

Ayer, durante la sesión del pleno de las Corts a la que no asistió el ya exjefe del Consell, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, mantuvo varias conversaciones con Alberto Fabra, compañero de escaño.

Abucheos y aplausos

Los rostros reflejaban la tensión que vivían los populares en esos momentos, previos a una dimisión que llegó a Génova sobre las 16 horas, una hora antes de que Camps compareciera ante la prensa.

Tras anunciar su marcha, Camps abandonó el Palau de la Generalitat entre abucheos que han frenado un aplauso inicial de unas 40 personas concentradas ante la sede de la presidencia. Según informó Efe, Camps salía del Palau junto a Barberá y ha sonreído mientras saludaba a aquellos que lo increpaban al grito de "ladrón", "corrupto" y "vete a tu casa". Camps entró en su coche y la alcaldesa en otro que recibió un golpe en la ventanilla de una de las manifestantes.

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