El programa experimental que se desarrolla desde el curso pasado en 24 centros de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) de la Comunitat Valenciana se duplicará a lo largo del nuevo ejercicio escolar, hasta llegar a unos cincuenta, explicaron ayer a este diario fuentes de la Conselleria de Educación.

Se trata de un plan piloto en el que se incorpora el libro de texto digital en el aula en coexistencia con el tradicional de papel.

Una de las características es que, al menos, un tercio de las asignaturas de deben estudiar a través de la red digital.

El conseller de Educación José Ciscar se referió ayer, durante su visita a Ondara, a este programa que su departamento lleva a cabo en 24 institutos -5 de Castelló, 7 de Valencia y 12 de Alicante- en el que participan 3.714 alumnos y 276 profesores.

El Baleares de Valencia es uno de los institutos que ha seguido a través de este procedimiento las asignaturas de Inglés, Ciencias Naturales y Matemáticas y para este nuevo curso ampliará el número de materias que se estudiarán con libros multimedia.

El control del profesor se mantiene o, incluso, se amplia ya que los deberes se pueden mandar por correo electrónico y son corregidos casi al instante.

Este plan piloto tiene como principal objetivo evaluar la incorporación en el proceso de enseñanza y aprendizaje del libro de texto web, así como su influencia en la mejora de la calidad educativa y en el éxito escolar del alumnado en la etapa de Educación Secundaria Obligatoria, apuntaron en un comunicado desde la conselleria. Se trata de conocer las ventajas e inconvenientes que se detecten en el sistema en los centros en los que se ha incorporado la experiencia.

La implantación progresiva del libro digital en los centros escolares no es exclusiva de la Comunitat Valenciana. En otras autonomías como las de Cataluña y Andalucía también existen planes experimentales. Y el mes pasado se supo que Corea del Sur -uno de los países con mejores resultados en el informe PISA de la OCDE- anunció que para el año 2014 sustituirá todos los libros de texto tradicional por las tabletas digitales.