Casi la mitad de los ayuntamientos de la Comunitat Valenciana tendrán literalmente que bajar la persiana si no cumplen con la obligación legal de remitir al Ministerio de Economía las cuentas liquidadas de 2010. El Gobierno ha decidido dar un puñetazo en la mesa y ha hecho saber a los municipios que retendrá en octubre los ingresos derivados de la recaudación de impuestos a todo los municipios que no han remitido la documentación solicitada. Estas transferencias cubren en torno al 25% del presupuesto anual por lo que si el ministerio cumple su ultimátum 224 alcaldes pueden tener serios problemas para pagar, entre otros capítulos de gasto, la nómina de sus trabajadores. Como media los ayuntamientos invierten un 30% de su presupuesto en pagar al personal.
Este diario informó el pasado 22 de agosto del listado de municipios valencianos que no habían rendido sus cuentas. El 80% de los ayuntamientos sobre los que ahora sobrevuela el fantasma de la quiebra son municipios de menos de 5.000 habitantes, pero también los hay con mayor población. Alzira, Ontinyent, Chirivella y Cullera figuran en el censo que el ministerio tiene colgado en su página web y actualizado a fecha 30 de agosto.
La obligación de informar al Gobierno central sobre el cierre presupuestario viene recogido en la Ley de Sostenibilidad. En principio el trámite debería haberse cumplido el pasado mes de marzo, pero el Ejecutivo central dio una prórroga hasta el 31 de julio a los alcaldes rezagados. También se les advertía de las consecuencias de su pasividad.
El censo actualizado no incluye a 2.514 consistorios, de los cuales 224 son valencianos. Dada la situación de asfixia que viven los ayuntamientos un bloqueo en las transferencias que llegan del Estado en concepto de anticipos de la recaudación podrían ser letal. De hecho, los datos proporcionados a Economía por 318 ayuntamientos que sí presentaron sus cuentas evidencian cómo las cuentas no se cuadran ni a machetazos. La mitad de estos ayuntamientos cerraron el ejercicio con déficit. La deuda con los bancos creció un 30%.
La FVMP pide sensibilidad
Desde la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP) que preside la popular Elena Bastidas se solicitó ayer al Gobierno que tenga "sensibilidad" con los municipios que "son las que más están sufriendo las consecuencias de las crisis". Bastidas es además alcaldesa de Alzira, uno de los municipios que aparece en el listado de Economía como incumplidora. Sin embargo, desde el ayuntamiento de esta localidad se aseguró ayer que la documentación se envió en marzo. Bastidas admitió que los municipios deben cumplir con la ley, si bien recordó que en mayo hubo elecciones y relevos en muchos ayuntamientos, lo que justifica el retraso en rendir las cuentas. Desde la FVMP se cuestionó también que a los ayuntamientos se les apriete más que a nadie después de años de "manga ancha".
