La consellera De León tendió la mano a la oposición con una propuesta de «ocho bases para el consenso», que contempla cambios en los órganos de gobierno de RTVV y sus sociedades. El consejo de administración pasará de 12 a 9 miembros y su mandato será de 6 años, en vez de los cuatro actuales. Las elecciones no amenazarán inmediatamente a los miembros de este órgano de gobierno. Sólo podrán ser reelegidos una sola vez y por un período de tres años, lo que acabará con canonjía de varios lustros, al estilo del expresidente del consejo Emilio Fernández, quien fue colocado por Eduardo Zaplana y dejó el cargo dieciséis años después. Al director general, como consejero, le son de aplicación estos cambios. Su elección corresponderá a las Corts, por mayoría cualificada de tres quintos.

La novedad apuntada ayer por De León, en este punto, es que en segunda votación bastará con una mayoría. Lo que seguirá garantizando al PP la última palabra en la designación del director general. Lo mismo que sucede ahora, sólo que la elección pasa del consejo —un reflejo de la composición de las Corts— a la Cámara. El principal cambio reside en que se quiere profesionalizar el puesto de consejero para que deje de ser un espacio usado por los partidos para acomodar a afines o a quienes se han caído de las listas. «Deberán acreditar su competencia profesional o empresarial, y el desempeño durante no menos de 5 años de funciones en alta dirección o en órganos de administración».

El Consell prevé también que puedan ser consejeros quienes «tengan méritos relevantes en el ámbito de la comunicación, la cultura, la función docente o investigadora». Requisitos comodín que abren la puerta de atrás a los políticos, como en el Consell Valencià de Cultura o el Jurídic Consultiu.

El socialista Josep Moreno denunció ayer que el presidente del consejo, Juan de Dios Navarro (PP), cobra 42.289 euros como vicesecretario de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), además de haber ingresado regularmente 739 euros mensuales en dietas, una cantidad que, según Moreno, nadie percibe.

De León explicó ayer la falsificación de firmas detectada en varias ofertas al concurso de 31 FM, como contó este diario. PSPV y EU le reprocharon al Consell que en cuatro años no resolvió el concurso y De León lo achacó a la «dificultad técnica de valorar las ofertas».