Los máximos responsables de la Real Acadèmia de Cultura Valenciana (RACV) y Lo Rat Penat, las entidades que no reconocen la normativa oficial del valenciano ni la unidad de la lengua y que han ejercido durante décadas como faro lingüístico y cultural del blaverismo, elogiaron ayer el "cambio" registrado en la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL). Después de que el nuevo presidente de la AVL, Ramon Ferrer -que procede de la RACV- calificara el viernes en su toma de posesión que es "prioritario" el mantenimiento de "relaciones de extrema cordialidad con las históricas entidades valencianistas" aludidas, el secesionismo lingüístico ha respondido con buenas palabras al incipiente cortejo de la Acadèmia. Es un "paso importante", admiten, para la aproximación hacia un hipotético punto de encuentro lingüístico entre las dos academias, una oficial y la otra minoritaria.

El decano de la RACV, Vicent Simó Santonja, afirma que su entidad "valora de forma muy positiva el reconocimiento" de la RACV y Lo Rat Penat realizado por Ramon Ferrer en su primer discurso. "Es la primera vez que se ha reconocido públicamente el valor cultural que tiene Lo Rat Penat y la RACV. Creo que, después de 96 años, nos merecíamos tanto lo que dijo Ramon Ferrer como lo que dijo el presidente Fabra", añade Simó Santonja. Además, el decano de la RACV considera que puede ser más que un primer paso. "Esto -es un paso importante y, evidentemente, seguirá hablándose".

¿Es posible que en este mandato de Ramon Ferrer pudiera consensuarse algo importante, como una normativa común, entre las dos academias? "Sería posible", responde el decano de la RACV, quien precisa que "la AVL, que es la que ha dado este paso, es la que tiene que proponer soluciones; no creo que nos toque a nosotros". Pero lejos de enrocarse, Simó Santonja no descarta que se abra una vía hacia la paz lingüística. "En este mundo, excepto la muerte todo tiene remedio. Ahora bien: ¿qué condiciones se han de dar? De momento, ya se ha dado un paso que yo considero importante por parte de la AVL y del presidente de la Generalitat. Ahora hay que hablar; porque eso depende de muchas cosas. Sólo han pasado tres días. A lo mejor, en enero ya tenemos ocasión de hablar y decir más cosas", señala el máximo representante de la institución secesionista.

Aplauden el "cambio de talante"

En el seno de Lo Rat Penat, el motor cultural del blaverismo desde la Batalla de Valencia, la nueva sensibilidad de la AVL también ha despertado una contenida esperanza. Su presidente, Enric Esteve, subraya que "no hay ninguna duda de que el cambio de talante en la Acadèmia es evidente". "Ramon Ferrer nos ha considerado. En su discurso nos ha nombrado y ha demostrado que cuenta con nosotros. Es bueno que la AVL no se cierre", añade.

A juicio de Enric Esteve, ahora hay una pregunta clave: "¿Hasta dónde está dispuesta a ir la AVL? Yo estoy -indica el presidente de Lo Rat Penat- por sumar, por dialogar y quiero ir a lo positivo. Todos tenemos algo bueno que aportar. Y está claro que la toma de posesión de Ramón Ferrer ha sido una buena forma de empezar. Ha entrado en el campo de fútbol con el pie derecho".

Ahora falta por saber si habrá partido o no. Un buen termómetro será el del 20 de enero, cuando Lo Rat Penat celebra su día grande, la gala de los Jocs Florals. En su discurso del año pasado, Esteve arremetió contra los "totalitarios" e "inquisidores" del blaverismo político, en una crítica que se ligó a Coalició Valenciana y Unió Valenciana. Desde entonces, ambos partidos han implosionado y no tienen actividad.