Durante casi diez meses, la dirección del Hospital La Fe ha hecho la vista gorda a que un oftalmólogo realizara operaciones complejas a pacientes de la lista espera sin tener vínculo laboral alguno con el centro hospitalario, según ha acreditado la inspección del Ministerio de Trabajo a raíz de la denuncia presentada por personal del centro hospitalario.

Las pesquisas e interrogatorios realizados durante la investigación confirmaron que el médico operaba sin contrato y sin estar dado de alta en la Seguridad Social por lo que la inspección sancionó a la dirección del centro hospitalario a abonar las cuotas del facultativo correspondientes a los meses de julio a diciembre de 2010, que fue el periodo en el que quedó acreditada la irregularidad laboral, según confirmó a Levante-EMV la Conselleria de Sanidad.

El especialista D. S. A., que había trabajado como médico adjunto en el servicio de oftalmología de La Fe, optó a una plaza de profesor ayudante doctor en la Universitat de València incompatible con cualquier puesto de trabajo ya sea público o privado.

Sin embargo, y a pesar de conocer las restricciones de su nuevo destino, el especialista permaneció dentro del equipo quirúrgico de oftalmología como si nada y con la autorización implícita del jefe de servicio, de tal modo que entre el 1 de julio y el 29 de octubre de 2010 participó como primer cirujano en 91 intervenciones, tal como ha quedado demostrado en los partes de quirófano.

Durante esos mismos meses dirigió también otras 16 intervenciones complejas en el hospital Infantil como primer cirujano a pesar de carecer de contrato con el hospital y de no tener, en consecuencia, el seguro de responsabilidad civil del personal de las instituciones sanitarias. A pesar de la flagrante irregularidad, el médico mantenía su agenda abierta en consultas externas de oftalmología, donde atendió a 176 pacientes, y de ortóptica y pleóptica (estrabismo), donde realizó otras 269 visitas y nueve exploraciones. Tras una segunda denuncia ante la Inspección de Trabajo en abril de este año, en la que se informaba que el especialista continuaba operando y pasando visita sin contrato, éste finalmente decidió renunciar a la plaza universitaria que le cerraba la puerta a su actividad asistencial.

El hospital apercibió al jefe de servicio

La dirección de La Fe y la Dirección General de Asistencia Sanitaria de la Conselleria de Sanitat notificaron al jefe de servicio de oftalmología del Hospital La Fe, Manuel Díaz Llopis, que el especialista D. S. A. no podía operar porque su colaboración con el hospital quedaba estrictamente limitada al área docente e investigadora como profesor ayudante doctor de la Universitat de València, y que, por lo tanto, debía quedar al margen de la actividad asistencial. Sin embargo, ambos hicieron caso omiso de la advertencia y, aunque el responsable se comprometió a que D. S. A. solo participaría en las intervenciones de carácter docente, este operó a más de un centenar de enfermos adultos e infantiles programados de la lista de espera.