Cuando expire el contrato que Valmor Sports, la sociedad participada por Bankia, Fernando Roig y Jorge Martínez Aspar, firmó para organizar la Fórmula 1, la gestión de esta empresa en el Gran Premio de Europa habrá costado a la Generalitat 110 millones de euros: 30 -por lo menos, a la espera de lo que diga la autoría de 2011- que debe Valmor a Bankia y a Circuito de Motor y Promoción Deportiva, la sociedad pública que administra el circuito de Cheste; los 20 del canon de 2011 y los 60 de los tres años que quedan de Gran Premio de Europa en Valencia, a razón de 20 por edición hasta 2014. Estos son los números de la operación financiera que, como ya avanzaba el lunes este diario, se gestó durante estas semanas pasadas y fructificó ayer finalmente con la asunción por parte de la Generalitat de la deuda de Valmor.

La incertidumbre se cierne sobre el Gran Premio de Europa. No sobre la carrera, porque el contrato con Bernie Ecclestone, patrón de la Fórmula 1, dura hasta 2014, sino sobre la gestión del mismo. Como ya adelantó Levante-EMV el pasado lunes, Valmor Sports estaba deseando deshacerse de la organización del gran premio, y el expiloto de Fórmula 1 Adrián Campos, deseando hacerse con ella. Aspar ya había dejado patente en varias ocasiones que no le importaba abandonar la gestión del Gran Premio, debido a las condiciones del contrato firmado con Ecclestone. De hecho, como informó este diario, Aspar se ha movido en Abu Dabi con la intención de encontrar algún grupo de inversión que entrara en la operación y permitiera a Valmor conservar la gestión de la Fórmula 1 sin que esta fuera un agujero sin fondo. Pero no ha sido así, y la deuda de Valmor ha llevado a la absorción de una sociedad que nacía con el impulso del por entonces presidente de la Generalitat Francisco Camps.

De esa importante deuda que acumula Valmor -unos treinta millones de euros-, aproximadamente quince de ellos se le adeudan a Circuito de Motor y Promoción Deportiva, y los quince restantes a Bankia. Así las cosas, cabría la posibilidad de que fuera la entidad financiera la que se hiciera cargo de la organización del Gran Premio, pero la dirección de la misma, en Madrid, no veía con buenos ojos la operación, principalmente porque uno de los grandes lastres con los que carga el Gran Premio, y que lo convierte en deficitario desde su primera edición, es el elevado canon (más de 20 millones) que cobra Ecclestone. Ni bajar el precio de las entradas, ni cambiar la carrera de fecha redundaría en números positivos en un futuro. Ni siquiera el reclamo de Fernando Alonso funcionaría. Pero tal como quedó ayer patente, por las declaraciones de la portavoz del Consell, Lola Johnson, la decisión de la Generalitat no implica ninguna modificación en el documento firmado en su día con el propietario de los derechos de la Fórmula 1, y que se mantendrá tal cual hasta 2014, momento en que se revisará el contrato.