El Ágora, la última de las «pirámides» de la Ciudad de las Artes y de las Ciencias, no se ha saltado la tradición de acumular sobrecostes que igualan o superan al presupuesto previsto. Ha sucedido con el complejo de ocio en su conjunto €unos 7oo millones de desviación en el coste de las obras€ y el último ejemplo era el puente de l´Assut de l´Or, que alcanzó los 46,5 millones, en vez de los 23,2 millones por los que se adjudicaron las obras. El Ágora llevaba, al cierre de 2010, enterrados ya 76,9 millones, según revela el informe de la Sindicatura. El contrato por el que se adjudicó la construcción de este vanguardista edificio multiusos llegaba a los 41,3 millones, pero la ejecución de las obras y la urbanización de la zona anexa han necesitado ya de modificados por valor de 35,6 millones. En el pasado ejercicio se certificaron obras por 10,4 millones, con un plazo de pago de 5 años y 270 días.

El edificio debía estar acabado totalmente en julio de 2010, pero los plazos se han incumplido sin que se haya una prórroga aprobada y justificada ni una suspensión de las obras que detenga los plazos de entrega y justifique el incumplimiento. La empresa pública Cacsa justificó ante el Síndic que el retraso se produjo por la celebración de «eventos», como el Open de Tenis, la Valencia Fashion Week o la Campus Party. Cacsa admitió ante la Sindicatura que la dirección de obra había alertado por carta sobre las consecuencias económicas y el deterioro en el edificio que la parada podía provocar. Ante esta situación, técnicos de Cacsa decidieron acometer obras por 3,2 millones sobre elementos indispensables para evitar ese deterioro y más sobrecostes acumulados. Los proyectos arquitectónicos y la dirección de obras también han sufrido la correspondiente variación al alza y en la misma proporción. Esos emolumentos llegan ya a los 9,2 millones, frente a los 4,98 previstos inicialmente. La adjudicación del anteproyecto y el proyecto básico de las torres de Calatrava, por 15.213.471 euros, en terrenos de Cacsa también se recoge en el informe. Pese al desembolso, el Consell no ha ejecutado esas torres por ser inviables.