La empresa instrumental creada por el Consell para construir colegios €Ciegsa€ atraviesa también una situación crítica. Por lo pronto, la Generalitat le debe nada menos que 2.327 millones de euros que tendrá que abonar mediante ampliaciones de capital hasta 2015. Con tal cantidad, pendiente de cobro, no es de extrañar que las pérdidas de la mercantil se hayan incrementado un 13% en un año (55 millones de euros en 2010 frente a los 48,5 millones de 2009) y que las dificultades para atender sus pagos sean palpables. También su endeudamiento a largo plazo se ha incrementado un 4,1% y se elevó, a 31 de diciembre de 2010, a 1.632 millones.

La Sindicatura de Comptes habla incluso de «incumplimiento significativo de la normativa aplicable a la gestión de los fondos públicos» en materia de contratación. El órgano fiscalizador denuncia que la sociedad no ha modificado las cláusulas de pago incluidas en los pliegos de condiciones tal y como marca la legalidad vigente en materia de morosidad. Ciegsa debería incluir compromisos de pago antes del plazo legal de 85 días.

La práctica de aplazar los pagos, detectado en diez de los doce centros revisados por el Síndic, supone un coste adicional para la empresa: 9,9 millones de euros por los intereses. La auditoría de 2010 también revela modificados y sobrecostes. Entre las recomendaciones del informe se reitera la conveniencia de que la disposición de fondos de cuentas bancarias se haga de forma mancomunada para evitar situaciones de riesgo.