El dinero que recibirán patronal y sindicatos de la Generalitat Valenciana estará condicionado a la creación de empleo, según el paquete de medidas de ajuste anunciado ayer por el Ejecutivo autonómico valenciano. El vicepresidente y portavoz del Consell, José Ciscar, aseguró tajante en la rueda de prensa que "se acabaron las subvenciones" para patronal y sindicatos. En su lugar, se implanta un nuevo sistema basado en incentivos a las asignaciones a los entes sociales. La fórmula de reparto estará supeditada a la creación de puestos de trabajo. "Si hay empleo, recibirán más dinero. Si se destruye recibirán menos", explicó. Dada la formulación de la propuesta, no hay valoración estimada de cuánto puede suponer de ahorro esta medida a las arcas públicas.

La medida fue acogida ayer con cierto escepticismo por los agentes sociales que incidieron en que los trabajadores van a acabar pagando los despilfarros del Consell. El Área Pública del sindicato Comisiones Obreras anunció que emprenderá acciones de rechazo a las medidas planteadas por el Gobierno Valenciano. "Consideramos que el Consell sigue eludiendo sus responsabilidades y gestionando de forma irresponsable los recursos de la ciudadanía por lo que se agravará la situación social" señaló el sindicato. Por su parte, el secretario de Comunicación de CC OO en Alicante, Salvador Roig, incidió en que el sindicato se financia con las cuotas de sus afiliados y que los cursos de formación están ligados a la consecución de objetivos. Roig señaló que la medida anunciada ayer "se trata de una propuesta muy inconcreta y no sabemos a qué se refiere".

Por su parte, el secretario general de FETE-UGT, Guillermo Martí, anunció que el sindicato pedirá responsabilidades penales al expresidente de la Generalitat Francisco Camps y sus distintos gobiernos por "despilfarro e incompetencia en la gestión de fondos públicos". UGT tiene previsto bien presentar una denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción o interponer una querella "contra los gestores responsables de haber llevado a la quiebra a la Generalitat". Martí señaló que "entendemos los sacrificios y que se bajen los sueldos y los complementos", a lo que añadió que "si nos sacrificamos, lo hacemos todos y no de manera arbitraria". El secretario general de UGT en l'Alacantí, Oscar Llopis, incidió en que "hace más de dos años que nos están recortando, pero no es esto lo que nos preocupa. Lo preocupante es que el peso de los recortes recaiga sobre los trabajadores".

Asimismo, Intersindical Valenciana criticó ayer el paquete de medidas al considerar que la Generalitat está haciendo "pagar su mala gestión" a los trabajadores. La organización subrayó que las medidas más que racionalizar u organizar el gasto sirven para hacer caja a costa de los trabajadores.