El sueño de Jorge Alarte de encabezar la representación valenciana en el congreso del PSOE, tras elegir a los 89 delegados en listas pactadas, para trasladar a Ferraz la sensación de control de la organización parece que se esfuma. A falta de 24 horas para que se celebren los cónclaves provinciales que designarán a quienes irán a Sevilla a votar a Alfredo Pérez Rubalcaba o Carmen Chacón, los distintos sectores del partido salieron anoche de la negociación a todas bandas con las posiciones más alejadas que cuando entraron. La clave Rubalcaba-Chacón está relegada a un segundo plano en una contienda que se dirime con la vista puesta en el congreso del PSPV, que tendrá en los cónclaves provinciales de mañana su ensayo general. A nadie le interesaba contarse, pero la falta de acuerdo aboca a varias listas.

Los críticos con la dirección de país que comanda Jorge Alarte no sólo están resueltos a presentar alternativas sino que ya las estaban elaborando. En Alicante, tienen casi cerrada una candidatura conjunta entre los afines a Leire Pajín y los partidarios de Ximo Puig. Cuentan con la mayoría de los representantes de las agrupaciones, que elegirán mañana a 30 compromisarios para el federal por las comarcas de Alicante.

Si no hay acuerdo de última hora con los partidarios de Alarte y la plataforma en favor de Rubalcaba, serán los afines a Blanquerías —comandados por Ángel Luna— los que presentarán batalla. En todo caso, tendrían garantizado el 20% de apoyo necesario para acceder al reparto de delegados.

En Valencia, la mayoría la controlan los alartistas. Entre el 55% y el 60%, según fuentes de este sector y algo menos si la tasación la hacen los críticos. Algunos hasta cuestionan esa mayoría. Pese a la intención inicial de Alarte y Puig de pactar la lista, fuentes afines al alcalde de Morella admitieron anoche que es más que complicado porque no se les reconoce ni un 15% de peso en la organización provincial.

Se cuece la alianza contra Alarte

Esa misma insatisfacción con Alarte la expresaron desde el entorno de Francesc Romeu, que presentará lista propia en solitario «por coherencia porque aquí se está hablando de componendas pero no de proyectos ni ideas». Pese a que sus delegados serán para Rubalcaba, como los de Alarte, Romeu no puede compartir lista con un secretario general al pretende relevar en el congreso de país. Al mismo tiempo, tampoco desea enrolarse en una «lista de todos contra Alarte», según indicó. Ir de la mano de Puig tampoco ayudaría a Romeu a proyectar una alternativa con entidad propia. Sin contar que Puig está con Chacón y Romeu con Rubalcaba. Lo que provocaría una llamada al orden desde Ferraz si Romeu cerrara ese pacto.

En el congreso provincial de Valencia se tramitarán 6.800 enmiendas a la ponencia marco. Entre otras las que apuestan por restablecer las comarcas.