Las ratas son unos de los principales animales, junto con aves como las palomas o parásitos como las garrapatas, portadores de enfermedades infecciosas que se contagian a los humanos.

Esta transmisión, conocida con el nombre de zoonosis, puede producirse en el caso de las ratas por varias vías. Además de por entrar en contacto con el propio animal, también por sus heces, la orina, los parásitos que transportan, una mordedura, la saliva, la sangre y por el aire.

Según los expertos, entre las enfermedades que pueden transmitir las ratas se encuentra una amplia gama como por ejemplo, tifus, triquinosis, rabia, tuberculosis, hepatitis, salmonelosis, etc.

Las consecuencias de contraer una de estas enfermedades en humanos pueden llegar a ser mortal en el caso de que las personas afectadas sean niños o ancianos.

Además, tal como explica Santiago Vega, decano de la facultad de Veterinaria de la Universidad CEU Cardenal Herrera, "las ratas son animales vectores biológicos de enfermedades. No importa que la rata sea de cloaca o de marjal. Aunque las de cloaca son más peligrosas, en ambos casos pueden ser portadoras de enfermedades, ya que las ratas de marjal también entran en contacto con otros animales".