"Es indignante que, todavía, a los niños de los pueblos valencianohablantes se les continue bautizando y enseñando la doctrina cristiana y las oraciones fundamentales en castellano. Es decir, que ni saben el padrenuestro ni el avemaría en valenciano, pero si saben blasfemar en esta lengua". Así se dirigen los cronistas oficiales de Agullent, Ontinyent y Xàtiva al arzobispo de Valencia, Carlos Osoro, en la carta que le enviaron en 2010 para pedir la normalización lingüística de la Iglesia y de la que aún no han recibido respuesta.

Los cronistas Ramón Haro, Alfred Bernabeu y Agustí Ventura, han decidido ahora dar a conocer dicha misiva con motivo de la reciente visita al arzobispo Osoro que ha realizado la Acadèmia Valenciana de la Llengua.

En el escrito apuestan por que el valenciano "es necesario que vuelva a ser presente y preferente en la Iglesia valenciana", como lo fue hasta la castellanización impuesta por el arzobispo Mayoral durante su largo pontificado (1736-1769). Entienden que la Iglesia valenciana, "sigue sin hablar en nuestra lengua propia, haciendo daño a nuestra cultura, tanto por obra como por omisión". Por ello ruegan a Santa María del Puig y a Sant Vicent Ferrer que "intercedan" para que la Iglesia "hable en valenciano, y no se separe por más tiempo Pueblo de Dios y Pueblo Valenciano".