La Comunitat Valenciana es la tercera región más descontenta con el funcionamiento del Estado autonómico, según un estudio de la Fundación de Cajas de Ahorro (FUNCAS) que dobla, respecto a 2005, el porcentaje de valencianos que lo considera "malo o muy malo".

Según la encuesta de esta entidad, con datos de 2010, el 26% de los valencianos considera que la organización del Estado autonómico funciona "bien o muy bien" (frente al 46% de 2005); el 47% lo ve "regular" (40% en 2005) y el 21% cree que está "mal o muy mal" (10% en 2005).

A nivel nacional, sólo uno de cada tres españoles cree que funciona "bien o muy bien",lo que rebaja la valoración obtenida cinco años antes, cuando cinco de cada diez ciudadanos lo percibía como óptimo.

Frente al 31 por ciento que tiene una visión positiva de la organización del Estado de las autonomías, el 18 por ciento estima que el funcionamiento es "malo o muy malo" mientras que un 45 por ciento opta por la calificación de "regular".

Por comunidades, La Rioja y Navarra son las autonomías que más valoran el funcionamiento de su Comunidad, por delante de Murcia y Cantabria además de la ciudad autónoma de Melilla.

Por el contrario, en Castilla y León y Cataluña es donde se dan los porcentajes más altos de personas descontentas con el funcionamiento autonómico, hasta un 22 por ciento; seguidas de Comunidad Valenciana y Canarias, con el 21.

El informe de FUNCAS destaca que entre 2005 y 2010 se produce una apreciable caída en la percepción que los españoles tienen de su Estado autonómico siendo Extremadura y Navarra donde se aprecia más esa caída.

Así, en 2005 el 70 por cien de los extremeños valoraba muy bien el Estado de las autonomías, porcentaje que bajó al 39 por ciento en 2010; situación que se repitió en Navarra, cuando se pasó del 63 por ciento en 2005 al 43, cinco años después.

A juicio del editor de FUNCAS y catedrático de la UNED, Fernando Pampillón, "se ha pasado el fervor autonómico" y, con la crisis, "la gente empieza a plantearse toda una serie de cosas", como la influencia de la administración autonómica en la situación actual.