La reflexión de Carlos Fabra sobre los gays que recoge el periodista Enrique de Diego en su libro "Dando Caña" provocó ayer la reacción del colectivo Lambda, que calificó de "absurdos" los argumentos atribuidos al presidente del PP castellonense. Por su parte, EU pidió los populares que aparten a Fabra y no den "por buenas sus declaraciones homófobas". Enrique de Diego (uno de los fundadores de Intereconomía, que fue despedido por Julio Ariza en diciembre) relata en su libro "Dando Caña", que verá la luz pronto, la cena que mantuvo en una marisquería con Carlos Fabra, su yerno Juan José Güemes y el propio Ariza. Según exlica, cuando abordaron el tema del matrimonio entre personas del mismo sexo, Fabra intervino para decir que "los homosexuales en Castelló nos votan a nosotros (al PP) porque son los dueños de los puticlubs, y nosotros los mejores clientes".

"Cae por su propio peso"

El coordinador general del colectivo Lambda, José de Lamo, restó trascendencia al comentario e incidió en que se trata de la versión que da una persona "sobre lo que otra dijo". Si esa frase se pronunció, añade, "caería por su propio peso porque ni el señor Fabra ni nadie puede saber lo que vota la gente de una determinada orientación sexual". "Es absurdo decir eso; en todo caso, yo no sé quiénes son los dueños de los prostíbulos de Castelló", sentenció el coordinador de Lambda.

Por su parte la diputada de EU, Marina Albiol, afirmó que "las palabras de Carlos Fabra sobre los gays en Castelló aparecidas en un libro de un periodista son absolutamente repugnantes y lamentablemente nada sorprendentes viniendo de quien vienen. Carlos Fabra es un personaje que debería estar fuera de la primera línea política, como presidente del PP de Castelló, y fuera de un cargo como el de presidente de Aerocas". Por ello, "exigimos a Alberto Fabra que le aparte de inmediato porque de otra manera estaría corroborando estas repulsivas declaraciones", añadió.