Los coches del futuro corren por las mentes de los 99 jóvenes estudiantes y profesores valencianos que van a participar a partir del próximo jueves en la Shell Eco-marathon de Rotterdam (holanda), la prueba más importante de Europa para vehículos de bajo consumo. En total competirán unos 3.000 universitarios y alumnos de Formación Profesional (FP) repartidos en 227 equipos. Todos buscarán recorrer la mayor distancia posible con el equivalente a un litro de gasolina, con el mayor rendimiento energético y las menores emisiones contaminantes posibles.

La representación valenciana acapara el protagonismo de la delegación española que viaja a Holanda, pues 10 de los 16 equipos que la componen son de la Comunitat Valenciana. La Universitat Politècnica de València (UPV) aporta dos vehículos, uno diseñado y fabricado en el campus de Vera y otro en el de Alcoi. El resto son de la Universidad CEU-Cardenal Herrera de Valencia, la Miguel Hernández de Elx (UMH), y de seis Institutos de Educación Secundaria (IES) públicos: La Marxadella (Torrent), Serra d´Espadà (Onda), Cotes Baixes (Alcoi), Leonardo da Vinci (Alicante), Canastell (Sant Vicent del Raspeig) y El Palmeral (Orihuela).

Esta carrera que corona al coche europeo más sostenible, es decir aquel que emplea la energía de la forma más eficiente, se disputa en dos modalidades: prototipos futuristas y 'Urban Concept'. Esta última categoría, la de concepto urbano, engloba a los vehículos diseñados bajo las mismas premisas que los coches que circulan por las calles.

Se puede concursar con motores de combustión interna —con cinco tipos de combustibles: gasolina, diesel, etanol, GTL (gas a líquido) y biodiesel— o por motorizaciones eléctricas impulsadas por energías alternativas (placas solares, pilas de hidrógeno y baterías).

El récord actual de la Shell Eco-marathon europea —la multinacional petrolífera holandesa impulsa también esta competición en América y Asia— para un ve-hículo de motor de combustión está en poder del instituto galo de La Joliverie, con 3.771 km/l de gasolina. Mientras que en motores eléctricos, el mejor registro lo alcanzó en 2010 el también vehículo francés de la Universidad Politécnica de Nantes, que batió un nuevo hito mundial con 5.046 km por litro de gasolina con una pila de hidrógeno.

Hay que destacar que los vehículos nunca llegan a recorrer esas distancias enormes, pues la prueba consiste en realizar un recorrido determinado y a una velocidad media dada —que este año será de 25 km/h— y al acabar se mide el combustible que se ha consumido, obteniendo su equivalencia en kilómetros con un litro de gasolina.

El récord de España es valenciano

El récord de España en una Eco-marathon lo logró el año pasado en Alemania el equipo de la Universidad CEU-Cardenal Herrera , al recorrer 2.534 kilómetros con el hidrógeno equivalente a un litro de gasolina, superando en un 40% la marca obtenida en 2010, que fue de 1.802 kilómetros. El 'IDEA CEU car' firmó el séptimo mejor resultado en la clasificación global que dominan los equipos franceses, que concursan en esta prueba desde que comenzó a rodar hace 28 años.

La semilla española en la Shell Eco-marathon la pusieron la UPV y la UMH de Elx, que llevan participando en la carrera desde 2002 y 2003. El director del equipo de la Politècnica, el profesor Francisco González Pajuelo, destaca que esta aventura "es un proyecto docente muy interesante para los alumnos, pues les permite completar su formación práctica al enfrentarse al diseño y desarrollo de un prototipo". De hecho señala que todos los alumnos de la UPV que han hecho su proyecto final de carrera en los diferentes vehículos que ha construido la UPV para está competición "están trabajando hoy en día en empresas importantes".

El profesor Miguel Ángel Oliva, coordinador del equipo de la UMH señala que en desarrollo del prototipo 'Dátil 12' hay siete proyectos finales de carrera de otros tantos alumnos. Cuenta que todos ellos "han podido encontrar buenos empleos para ingenieros, pues las empresas valoran mucho este tipo de trabajos prácticos".

Desde los institutos de FP, Carlos Hernández, del IES Palmeral de Orihuela, incide en el valor formativo de esta experiencia, pues permite que los jóvenes "accedan a unas tecnologías que de otra manera sólo verían en los libros".