El Consejo de Ministros y el pleno del Consell aprobarán en sus reuniones del viernes las ayudas a los afectados por los incendios forestales que han afectado al interior de la provincia de Valencia en los últimos días y que han calcinado cerca de 50.000 hectáreas. Así lo anunciaron ayer el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, y el ministro del Interior, Jorge Fernández Díez, quien se trasladó ayer a Valencia para conocer de primera mano las tareas de extinción de los incendios iniciados en los municipios de Cortes de Pallás y Andilla.

El Gobierno central, la Generalitat y las diputaciones conformarán una comisión interdepartamental que será la encargada de valorar las peticiones que se cursarán a través de los ayuntamientos de las poblaciones afectadas y se canalizarán a través de tres puntos de información, dos en Valencia y uno en Castelló. El ministro destacó que lo primordial es "pagar cuanto antes a los afectados" y Fabra explicó que se va a hacer un esfuerzo para asumir la "totalidad" de las ayudas, ya que se trata de municipios que no tienen capacidad para asumir el 50% de las aportaciones. Tanto Fernández Díaz como Fabra negaron problemas de coordinación. "La coordinación ha sido espléndida", aseguró el ministro, quien destacó que sólo dos horas después de que se declarara el jueves el incendio de Cortes de Pallás, la Unidad Militar de Emergencias (UME) "ya estaba activada" e insistió en que desde el punto de vista de la respuesta la "prueba se ha superado". El ministro resaltó la implicación del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en esta cuestión, como a su juicio lo demuestra su presencia y la de los ministros de Agricultura y Defensa e indicó que está siguiendo "día a día" todas las actividades.

Fabra sostuvo que "en ningún caso ha habido descoordinación" y aseguró que el protocolo "ha funcionado en momentos de muchísima tensión" y se ha sabido "atender cada una de las circunstancias", por lo que se premiará a todo el equipo humano con la Alta Distinción de la Generalitat. Pidió que "nadie intente buscar en lo que es una diferencia de presupuesto" o en la falta de medios la causa de los incendios, ya que este año se cuenta con cerca de 100 millones, un millón más que el año pasado, cuando "sólo se quemaron 2.500 hectáreas".

Así, recordó que diariamente han trabajado 1.800 personas en los trabajos de extinción y que se han contado con más de 40 medios aéreos, que han trabajado en las peores condiciones, y que en algún caso han tenido que dejar las labores porque la visibilidad era "absolutamente nula". Insistió que lo ocurrido ha sido "una catástrofe natural propiciada por dos negligencias", ya que a un invierno seco se ha sumado unas temperaturas de entre 30 y 40 grados, los fuertes vientos y la baja humedad relativa, que han "desbocado" el incendio.

"La naturaleza nos ha examinado y hemos sido capaces de responder con mucha seriedad, responsabilidad y sensatez", consideró. Fabra dijo que la Generalitat ha superado "una difícil prueba".