La dirección de la Ciudad de las Artes y las Ciencias (Cacsa), dependiente de la Generalitat Valenciana, anunció ayer al comité de empresa el inicio del despido colectivo del 50% de la plantilla, formada actualmente por 325 trabajadores, "para adecuar su estructura a la situación de crisis".

La Generalitat comunicó que el despido colectivo se enmarca dentro del "plan de viabilidad" de la empresa, que recoge medidas para garantizar la competitividad del complejo en el futuro.

También se indicó que de mutuo acuerdo, las partes han establecido iniciar el periodo de consultas el día 6 de agosto en aras a alcanzar un acuerdo satisfactorio para ambas partes.

En un comunicado se explicó ayer que ante "la difícil situación económica, el Consejo de Administración de Cacsa aprobó en reunión celebrada el 11 de junio de 2012 el inicio de la tramitación del despido colectivo con el objeto de reducir costes y recortar las pérdidas, nivelando los ingresos y gastos para tener menos dependencia de la administración".

Ese ajuste de personal obedece a causas económicas, procedentes de la disminución de asignación presupuestaria y el descenso generalizado en el volumen de ingresos de la empresa, provocados ambos por la coyuntura económica global, y a causas organizativas ante la necesidad de adaptar los recursos a la situación actual, añaden.

Desde la Generalitat se ha hecho hincapié en que desde el año 2010, Cacsa "lleva aplicando una política de restricción de gastos y ha puesto en marcha, entre otras muchas medidas, un Plan de Saneamiento para reducir los gastos de funcionamiento de la Sociedad".

Sin embargo, estas actuaciones "han resultado insuficientes por lo que se ve en la necesidad de aplicar otras medidas de austeridad más allá de las ya adoptadas y que pasan por reajustar la plantilla, cuyo gasto supone el 25% del presupuesto de la sociedad", añadieron desde la Generalitat.

Por último, en el comunicado se asegura que la Ciudad de las Artes y las Ciencias "garantiza su compromiso por seguir realizando su labor y ofreciendo sus contenidos con el máximo nivel de calidad y excelencia tal y como ha hecho a lo largo de estos años en los que ha conseguido consolidarse como emblema de la Comunidad Valenciana".

El despido colectivo en la Ciudad de las Artes y las Ciencias es el quinto que anuncia o ejecuta la Generalitat en pocos días.

Los otros cinco son el del Instituto Valenciano de la Vivienda (Ivvsa), con 211 trabajadores despedidos de 327; el de la empresa Valenciana de Aprovechamiento Energético de Residuos (Vaersa), que deja en la calle a 350 trabajadores; el de la empresa pública Construcciones e Infraestructuras Educativas de la Generalitat (Ciegsa), con 70 empleados despedidos de los 90 que tenía o el de Radio Televisión Pública Valenciana (RTVV), donde 1.295 profesionales engrosarán las filas del desempleo.

En el caso de RTVV, el ERE donde existen más trabajadores afectados, el presidente de la Generalitat justificó esta decisión y no el cierre del ente autonómico porque la Comunitat Valenciana tiene "lengua propia" y se debe "prodigar" y "fomentar" su uso. Fabra ha hecho hincapié en varias veces sobre la situación "dolorosa" que supone los despidos. Los ERE en el sector público valenciano afectarán a 4.000 o 5.000 empleados.