Varios armadores de la Cofradía de Pescadores de Valencia han denunciado a la entidad por un presunto desfalco que ascendería a unos 700.000 euros. El presidente de la cofradía, José Ramón Domingo, asegura que el dinero "no ha desaparecido" y atribuye lo sucedido "a una mala gestión" de la persona que durante varios años se ha ocupado de los pagos de la entidad.

El grupo d 6 ó 7 armadores, que ya han denunciado -el proceso comenzará en septiembre-, asegura que ellos pagan la Seguridad Social, el combustible, las cuotas... y demás requerimientos de la cofradía. Sin embargo, varias llamadas de los proveedores, así como gestiones en el seno del órgano de pescadores, demostraron que los pagos que ellos creían tener al día en realidad eran deudas que iban creciendo. "Venía alguien diciendo que le habían dicho que debía el combustible y no entendía por qué", explica Domingo.

La razón es que la persona que se ocupaba de los pagos, un miembro de la Cofradía, únicamente pagaba "los intereses de la deuda de unos 700.000 euros que la cofradía tiene desde hace varios años", comenta Domingo. Además, esta persona "pagaba los sueldos de los directivos de la cofradía". Así, se consiguió reducir la deuda, que ahora está en unos 600.000 euros según el presidente de la entidad, pero no llevar al día los pagos de la cofradía con los proveedores. Esa es la razón de la falta de liquidez. "Aquí nadie ha robado nada", comenta el presidente.

Domingo se escuda en que quien hacía los pagos "lo hacía bajo mano": "No me enteraba". "Estamos mirando hacer una auditoría para aclarar las cuentas después de la salida de esta persona", indica Domingo. "Nos enteramos cuando nos dijeron que debíamos el gasoil, en marzo o abril de 2011", relata el presidente de la cofradía. "Incluso nos ha salido un armador que en 2011 debía seis meses de Seguridad Social cuando ya la había pagado", comenta Domingo, que asegura que en septiembre tiene que ir a declarar, aunque dice estar "muy tranquilo" porque no tiene "nada que ocultar".

Mala ubicación

Una de las razones de los problemas económicos de la cofradía es, según el presidente de la entidad, la ubicación de la misma: quedó al sur de la Marina Real Juan Carlos I. "Desde 2007 llevamos pidiendo a la Conselleria de Pesca que nos saque de aquí y nos lleve al puerto, pero no nos hacen caso", dice. El problema es que donde están "no pueden entrar las embarcaciones de pescado azul, que dejan mucho beneficio en la cofradía", asegura el presidente de la cofradía.