La Generalitat valenciana pretende impulsar la mediación como mecanismo extrajudicial para resolver conflictos civiles y mercantiles por tratarse de un procedimiento "más ágil y menos costoso" que, además, contribuirá a reducir la carga de los órganos judiciales de la Comunitat.

Así lo indicó ayer el conseller de Justicia y Bienestar Social, Jorge Cabré, que resaltó la "clara apuesta por la desjudicialización de confictos" del Ejecutivo autonómico, que estudia la puesta en funcionamiento de un Centro de Mediación de la Generalitat con sedes en las tres provincias, a través del cual se canalizarían y gestionarían todas las actividades relacionadas con la mediación, y que ofrecería a su vez unas instalaciones en las que centralizar administrativamente esta actividad. "La Conselleria está ya trabajando en un borrador en el que se defina la estructura administrativa, los instrumentos necesarios, los requisitos de formación, así como los mecanismos de control y supervisión de la actividad para trasladarlo posteriormente a todos los colectivos que van a llevar a cabo la mediación, a jueces y colegios profesionales con el fin de recabar sus opiniones y que puedan realizar todas las aportaciones y propuestas que consideren", explicó Cabré. El conseller destacó que el objetivo es "consensuar con todos ellos la implantación de un servicio de mediación eficiente y de referencia en la Comunitat Valenciana".

En marcha en 2013

La idea es crear la estructura administrativa necesaria para poner en marcha en 2013 este centro de mediación, que tendrá sedes en las tres provincias y que formará parte de la Administración de Justicia. Para Cabré, la ubicación más idónea sería en los edificios que albergan las ciudades de la justicia para que su uso resulte "cómodo y accesible a todos los ciudadanos"