El diputado nacional del Partido Popular Vicente Ferrer aceptó ayer cumplir una condena de ocho meses de retirada de carné tras dar positivo en un control de alcoholemia en Valencia. El político popular, que no desveló su condición de diputado, asumió también el pago de un multa como responsable de un delito contra la seguridad del tráfico. Ferrer fue citado ayer en el juzgado de guardia de Valencia tras haber sido sorprendido hace tres días en una calle de Valencia circulando con una tasa de alcohol superior a la permitida. Es el segundo diputado nacional del PP por Valencia condenado por conducir ebrio en los últimos dos años tras el caso de Ignacio Uriarte, expresidente de Nuevas Generaciones cuando circulaba por Madrid. Uriarte sí que se identificó como diputado y aunque quería ser juzgado por un magistrado ordinario su caso pasó al Tribunal Supremo al tener la condición de aforado. El Supremo condenó a Uriarte a ocho meses de retirada de carné y al pago de 2.400 euros de multa.

Fuentes próximas al caso explicaron que Vicente Ferrer no opuso resistencia cuando fue sorprendido por la policía conduciendo bajo los efectos del alcohol y colaboró con los agentes en la prueba de alcoholemia. Ferrer se benefició de una rebaja de un tercio de la condena al reconocer su culpa en el juicio rápido que se celebró por la mañana en la Ciudad de la Justicia ante el fiscal y el titular del juzgado de Instrucción número 19 de Valencia, Luis Carlos Presencia Rubio. Vicente Ferrer carecía de antecedentes penales.

Vicente Ferrer es diputado del PP por Valencia en el Congreso desde 2008 y actualmente es portavoz de la comisión de Defensa. El diputado, que también es abogado de profesión y alférez del cuerpo de infantería de Marina en su condición de reservista, perteneció a Unió Valenciana antes de ingresar en el Partido Popular. Ferrer hizo unas declaraciones polémicas en mayo de 2010 al llamar a Rodríguez Zapatero, en aquel momento presidente del Gobierno, «timonel borracho».

Vicente Ferrer tiene que hacer entrega en el juzgado del carné de conducir y no puede volver a coger un coche en los próximos meses para evitar un delito de quebrantamiento de condena.

En el caso de que Ferrer se hubiera identificado como diputado tendría que haber sido juzgado en el Supremo. Uriarte también asumió su culpabilidad cuando se celebró el juicio en el Tribunal Supremo. El expresidente de Nuevas Generaciones dio positivo en una prueba de alcoholemia que le hizo la policía local de Madrid el 19 de febrero de 2010 cuando volvía de celebrar su despedida de soltero. Uriarte tuvo un accidente con otro coche en la calle Serrano sin que se produjeran heridos, pero fue descubierto al personarse la policía local para realizar el atestado.

Juzgado ordinario

Ignacio Uriarte estaba dispuesto a que la causa se tramitara en un juzgado ordinario de Madrid, pero el fiscal del caso entendió que no podía renunciar al fuero parlamentario mientras mantuviera su escaño en la Cámara baja. Este dilema no se produjo ayer en Valencia porque Vicente Ferrer no se identificó como diputado nacional y su condición de aforado pasó desapercibida para las partes.