El diputado nacional del PP condenado por circular ebrio, Vicente Ferrer, triplicó la tasa de alcoholemia, según recoge la sentencia. El político popular, como ayer adelantó Levante-EMV, ha sido condenado por un delito contra la seguridad del tráfico tras ser sorprendido el domingo circulando bajos los efectos del alcohol. La Policía Local de Valencia paró a Vicente Ferrer porque conducía de "forma zigzagueante" y dando bandazos.

El diputado, que no ha respondido a las llamadas de este periódico, aseguró ayer a Europa Press que "fue un error". El Partido Popular no ha adoptado ninguna medida disciplinaria contra él a pesar de la condena, según confirmó un portavoz del grupo parlamentario en el Congreso de los Diputados. Vicente Ferrer llamó a José Luis Rodríguez Zapatero "timonel borracho" cuando era presidente del Gobierno. Ayer afirmó que su declaración fue malinterpretada.

El diputado fue parado por dos agentes de la Policía Local en la avenida del Levante UD de Valencia. Los agentes sometieron al político a la prueba de alcoholemia y dio 0,79 miligramos de alcohol por litro de aire espirado cuando el límite es 0,25. El diputado, que no desveló su condición de aforado, dio en la segunda prueba 0,82 y en la tercera 0,84. Según recoge la sentencia, Vicente Ferrer presentaba "aspecto abatido, aliento alcohólico, rostro rojizo, ojos acuosos, pupilas dilatadas, habla pastosa, ropa sucia" y caminaba con balanceos.

El diputado reconoció los hechos en el juzgado de guardia y aceptó como condena ocho meses de retirada de carné y el pago de una multa de 900 euros. Fuentes del PP en el Congreso indicaron que Vicente Ferrer comunicó los hechos al responsable del grupo parlamentario.

Según declaró Ferrer a Europa Press, el pasado domingo salía de una fiesta de cumpleaños que se prolongó más de lo previsto ya que empezaron a la una y terminaron a las ocho, y había "bebido de más". "Asumo mi responsabilidad y la pena que se me ha impuesto", señaló, y recordó que en ningún momento hizo "alarde" de su condición de diputado. En esta línea, recalcó que se equivocó "ya que pudo haber cogido un taxi", y añadió que adoptó una decisión "en un momento en que no lo debía de haber hecho" porque estaba cerca de su casa.

Vicente Ferrer es el segundo diputado nacional del PP por Valencia condenado por conducir ebrio tras el caso de Ignacio Uriarte, expresidente de Nuevas Generaciones, cuando circulaba por Madrid. Uriarte sí que se identificó como diputado y aunque quería ser juzgado por un magistrado ordinario su caso pasó al Tribunal Supremo al tener condición de aforado. El Supremo condenó a Uriarte a ocho meses de retirada de carné y al pago de 2.400 euros de multa.

En el caso de que Ferrer se hubiera identificado como diputado tendría que haber sido juzgado en el Supremo. A diferencia de Uriarte, su condición de aforado pasó desapercibida para el fiscal y el juez encargado del caso.

Rebaja de 450 euros

La fiscalía pedía inicialmente que Ferrer fuera condenado a pagar una multa de 1.350 euros y la retirada del carné, pero aceptó rebajar un tercio la condena a cambio de su reconocimiento de los hechos en el juicio rápido. El diputado carecía de antecedentes penales y no opuso resistencia.