La Fiscalía de Valencia va a pedir la nulidad de la condena del diputado del PP Vicente Ferrer por conducir ebrio tras descubrir que ocultó su condición de aforado cuando declaró en el juzgado de guardia. El ministerio público considera que el caso tiene que ser juzgado en el Tribunal Supremo porque la condición de aforado es "irrenunciable". Vicente Ferrer, que triplicó la tasa de alcoholemia, ha acudido de nuevo a la Ciudad de la Justicia tras recibir la citación del juzgado de Instrucción número 19 y ha confirmado al juez que es diputado. El juez, según confirmó ayer el TSJ, todavía no ha resuelto si anula la condena que le impuso el miércoles y remite el caso al Supremo.

Fuentes de la Ciudad de la Justicia indicaron que Vicente Ferrer debió informar de su condición de aforado, obligación que no podía desconocer porque además es abogado. Vicente Ferrer, que es el portavoz de Defensa del PP, estuvo en la comisión de Justicia en la pasada legislatura y, por tanto, implicado en la reforma del Código Penal.

El político popular, como adelantó Levante-EMV, fue condenado por un delito contra la seguridad del tráfico tras ser sorprendido el domingo en la avenida del Levante UD de Valencia circulando bajo los efectos del alcohol. La Policía Local de Valencia paró a Vicente Ferrer porque conducía de "forma zigzagueante" y dando bandazos. Los agentes sometieron al político a la prueba de alcoholemia y el resultado fue de 0,79 miligramos de alcohol por litro de aire espirado cuando el límite es 0,25. El diputado dio en la segunda prueba 0,82 y en la tercera 0,84. Vicente Ferrer presentaba "aspecto abatido, aliento alcohólico, rostro rojizo, ojos acuosos, pupilas dilatadas, habla pastosa, ropa sucia" y caminaba con balanceos.

Ocho meses sin carné

El diputado reconoció los hechos en el juzgado de guardia de Valencia y aceptó como condena ocho meses de retirada de carné y el pago de una multa de 900 euros.

El político del PP aseguró que "fue un error" y explicó que el domingo salía de una fiesta de cumpleaños que se prolongó más de lo previsto ya que empezaron a la una y terminaron a las ocho. La Fiscalía -que en ningún momento supo de su condición de aforado- pedía inicialmente que Vicente Ferrer fuera sentenciado a pagar una multa de 1.350 euros y a la retirada del carné de conducir, pero aceptó rebajar la condena a cambio de su reconocimiento de los hechos en el juicio rápido.

Vicente Ferrer llamó a José Luis Rodríguez Zapatero "timonel borracho" cuando era presidente del Gobierno. Tras trascender su condena por circular ebrio en Valencia, aseguró que su declaración fue malinterpretada por los medios de comunicación.

Es el segundo diputado nacional del PP por Valencia condenado por conducir ebrio en los últimos dos años tras el caso de Ignacio Uriarte, expresidente de Nuevas Generaciones cuando circulaba por Madrid.