Perdida la pelea por las inversiones, la verdadera batalla del Consell de Alberto Fabra está centrada en arrancar al ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, un nuevo plan de proveedores que permita a la Generalitat saldar sus deudas con los proveedores. La llegada en los próximas horas de los 750 millones de euros del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) permitirá empezar a liberar algunos pagos, pero esta cuantía es claramente insuficiente, según admiten diversas fuentes del Consell. Las obligaciones pendientes de pago están ya en alrededor de 2.800 millones de euros y Fabra es consciente de que para limpiar toda la deuda el FLA no será suficiente. De ahí sus negociaciones con Montoro para activar una suerte de nuevo plan de proveedores. Fuentes del Ejecutivo aseguran que el acuerdo está próximo a cerrarse, si bien todavía no está atado. La idea es cerrar un calendario de pagos para que en un plazo máximo de cinco meses la Generalitat pueda dar garantías a sus proveedores de que habrán cobrado. Tal como ha venido contando este diario, Hacienda da inicialmente por concluido el reparto del FLA con los 2.500 millones autorizados para la Comunitat Valenciana el pasado jueves. Limpios de polvo y paja, es decir, descontado el pago a bancos y saldadas las deudas con el Estado, al Consell apenas le quedan 646 millones para hacer frente a la larga lista de proveedores, en la que están incluidos, farmacias, colectivos sociales, conciertos, etc. Otros, como asociaciones, sindicatos o ayuntamientos están a la cola y sus posibilidades de acogerse a los préstamos del ICO amparados por el FLA son ínfimas. Saldar las deudas es ahora el objetivo principal de la Generalitat y de ahí que desde el PP valenciano se asegura que es donde el Consell está siendo inflexible.

El presidente Fabra ya avanzó la la semana pasada durante la sesión de control en las Corts sus conversaciones con Madrid para que salga adelante un nuevo plan de proveedores. También habló de un calendario de pagos. Algunas fuentes hablan de un tope de cuatro o cinco meses, de tal manera que en abril de 2013 estén saldadas todas las deudas.

La necesidad de pagar cuánto antes o al menos poder enviar un mensaje de tranquilidad a los proveedores es para, según el PPCV, la principal prioridad del Consell. De hecho, destacan, Fabra logró durante su reunión con Montoro hace dos semanas que la primera remesa de dinero fuera el doble de lo previsto inicialmente. Así, Hacienda pensaba inicialmente autorizar 300 millones de euros. Finalmente, la primera remesa será de 750.