La titular del juzgado de lo Penal número 6 de Valencia, Begoña Estañ, ha absuelto de un delito de estafa al exmilitante del PP José Luis Bayo, que fue denunciado por la dueña del club Majestic por pedirle dinero por la licencia de apertura. El fiscal retiró la acusación contra Bayo en el juicio y la denunciante, Pilar Monreal, ni se presentó en la vista, según recoge la sentencia a la que ha tenido acceso Levante-EMV. Bayo lamentó ayer que lleva dos años apartado del PP por una «acusación falsa» y exigió a la formación que le permita reintegrarse.

El caso se destapó en marzo de 2011 cuando Pilar Monreal denunció ante la Fiscalía Anticorrupción haber sido víctima de una extorsión. Pilar Monreal aseguró que José Luis Bayo „en aquellos días novio de su hija y ex presidente de Nuevas Generaciones en Valencia„ le exigió el pago de una comisión de 100.000 euros a cambio de tramitarle la licencia de actividad, que supuestamente tenía que conceder el edil del Ayuntamiento de Valencia Vicente Igual. La magistrada de Instrucción desvinculó del caso a Vicente Igual y no lo citó ni como testigo.

Monreal señaló que llegó a entregar 42.000 euros y un Rólex como peaje para que el Ayuntamiento de Valencia le diera la licencia de apertura. La denunciante afirmó que el dinero y el regalo se lo entregó a José Luis Bayo. Monreal aseguró en varias ocasiones que el dinero lo recaudaba Bayo para el concejal. El edil negó la acusación y presentó una denuncia contra Monreal.

La investigación se inició por un delito de cohecho. Al quedar fuera Vicente Igual, la magistrada de Instrucción imputó a José Luis Bayo por estafa.

José Luis Bayo insistió ayer en que considera que se ha sentido indefenso durante el proceso y lamentó la decisión del Partido Popular de suspenderle de militancia. La sentencia incide en que «no ha quedado acreditado ninguno de los hechos objeto de enjuiciamiento». El fiscal retiró la acusación al entender que los hechos habrían prescrito.

El juzgado de lo Penal número 7 impuso en enero nueve meses de prisión a Pilar Monreal por incumplir la orden de cierre del local de alterne que regentaba en la calle Marco Merenciano. Monreal fue condenada por desobediencia.

El abogado del Ayuntamiento de Valencia explicó en el juicio que la alcaldesa ordenó el cese de actividad. La sentencia recogió en el apartado de hechos probados que la Policía Local acudió en once ocasiones al local para precintarlo sin éxito. Las once actas de orden de cese y precintaje del local de alterne fueron firmadas por Pilar Monreal o por empleados suyos. El ayuntamiento estuvo cinco años intentando cerrar el local de alterne y solo lo logró cuando cambió de dueño.