El exconseller y vicesecretario general del PP, Esteban González Pons, responsabilizó ayer políticamente al Consell de Francisco Camps de haber apadrinado el convenio rubricado con el Instituto Nóos en 2005 y en virtud del cual la Generalitat pagó 382.200 euros a Iñaki Urdangarin y Diego Torres por organizar unos Juegos Europeos que nunca se celebraron. En su declaración ante el juez José Castro, instructor del caso Urdangarin, Pons se desentendió del acuerdo comercial rubricado por él mismo.

"Con mi firma no se pagó ni un euro público al Instituto Nóos", sentenció González Pons ante una nube de micrófonos y cámaras que lo esperaba a la salida de los Juzgados de Madrid, a las 19 horas, sesenta minutos después de su citación. El pleno del Consell de 5 de mayo de 2006 acordó la firma del convenio para organizar los Juegos Europeos en Valencia, que iban a costar 3 millones de euros.

Finalmente, como no cuajó la iniciativa, solo se abonó el primer plazo por los citados 382.200 euros. Al igual que en su primera declaración judicial por este asunto, también como testigo, el exconseller insistió en su papel irrelevante en la decisión de pagar al yerno del Rey y a Torres, que, a esas alturas, ya habían celebrado dos de las tres ediciones del Valencia Summit.

De haber sido él quien tomara la responsabilidad de la decisión "me habría pensado mucho rubricarlo", llegó a decir Pons. "Es verdad que mi firma está en el convenio (...) pero también es verdad que mi firma está por un acuerdo previo del Gobierno de la Generalitat Valenciana y que con mi firma no se comprometió ni un euro público ni se pagó un euro público al Instituto Nóos", reiteró. Que es como apuntar directamente al presidente Francisco Camps o al entonces vicepresidente Víctor Campos.

Pons aseguró que "por respeto al juez Castro y su investigación" ha guardado silencio desde que salieron las primeras informaciones que le relacionaban con Nóos, pero aclaró que sus palabras respondían a que debía explicar lo que tenía "ganas de decir" desde hace más de un año. "He guardado silencio durante un año y voy a volver a guardar silencio por respeto al tribunal que está investigando", advirtió, para proclamar: "Ya está bien de informaciones que relacionan mi firma con el pago a Iñaki Urdangarin".

González Pons dijo haber dado por cumplido su"deber ciudadano" de declarar como testigo, en un asunto "de mucha importancia" que está investigando el juez de Palma, y confía en que su testimonio haya servido al magistrado para "avanzar en su investigación".