El Supremo ha cerrado el caso de los trajes. ¿Ahora qué?

Alguien debería plantearte la dimisión, como Ximo Puig. Se trata de tener vergüenza política. A Camps se le atacó casi como en los tiempos de la inquisición. Si somos todos demócratas y asumimos las sentencias de la justicia, cuando se ha maltratado a un señor que era presidente, que sacó más votos que el resto de la izquierda junta, que entonen el mea culpa. Es necesario y, además, elegante.

¿Así se le resarciría?

De tanto escarnio uno no se recupera nunca. No le van a subsanar la salud, el daño a su familia, pero si piden perdón sería sinónimo de que sigue habiendo ética.

Y que debería hacer su partido. ¿Devolverle el cargo?

Lo pasado, está pasado. Cuando alguien como Camps abandona la presidencia de la Generalitat para, como el dijo, no perjudicar a la C. Valenciana, a la gente que le votó y a su partido, difícilmente puede haber rectificación. Quienes querían que Camps fuera el primer corrupto de España deberán elegir a otro.

Entonces ¿qué cree podría hacer el PP por Camps?

Desde el martes a la dos de la tarde se ha abierto un plazo insospechado, una ocasión para todos (desde el último afiliado hasta el que más manda) para buscar consensos, unir sensibilidades y relanzar el partido. Guste o no la izquierda nos ha dado un mártir político.

¿Ve a Camps en un cargo fuera de la C. Valenciana?

Que nadie piense que la vida de Camps está fuera de la C. Valenciana. El es más valenciano que el Miguelete, no se puede ser más valenciano. Pero Paco nunca hará nada contra su partido.