Las víctimas del accidente de Metro Valencia de 2006, que dejó 43 muertos y 47 heridos, han dedicado hoy sus cinco minutos de silencio a las de otras cuatro tragedias: los siniestros de Santiago de Compostela, del vuelo de Spanair y del Yak-42, así como a las de los atentados del 11-M de Madrid.

La Asociación de Víctimas del Metro 3 de Julio ha celebrado esta tarde su concentración mensual para exigir responsabilidades por lo ocurrido hace siete años, una convocatoria celebrada en la plaza de la Virgen que ha congregado a un millar de personas.

Con una gran pancarta con el lema "43 muertos, 47 heridos y 0 responsables", sus representantes han querido en esta ocasión dedicar los cinco minutos de silencio a las víctimas de las citadas tragedias. "Todos somos víctimas que tenemos que luchar a brazo partido con la justicia", han reivindicado.

La presidenta de la asociación, Beatriz Garrote, ha explicado a los presentes el estado en que se encuentra judicialmente el caso, después de que la Fiscalía haya pedido su reapertura ante la posible existencia de nuevas pruebas, y ha confiado que el próximo 3 de octubre puedan celebrar en esa misma plaza que se les ha admitido como acusación particular, tras haberlo pedido ayer.

También ha mostrado su esperanza en que se abra juicio por estos hechos y que pasen por él como imputados, "uno tras otro", responsables de Ferrocarrils de la Generalitat (FGV) y del Gobierno valenciano. "Nos hemos convertido en expertos en resistir y con vuestro apoyo, casi en invencibles", ha señalado Garrote para aventurar que si el grupo parlamentario popular rechaza volver a constituir una comisión de investigación en Les Corts, será porque sus diputados "no tienen la dignidad suficiente".

Asimismo, ha valorado que el juez que instruye el siniestro ferroviario de Santiago de Compostela esté investigando si hubo las medidas de seguridad adecuadas y haya imputado a sus responsables. "Eso es algo que se nos ha negado tanto política como judicialmente en Valencia", ha lamentado para remarcar que la tutela judicial de las pruebas se haya hecho "de forma efectiva" a diferencia del caso de Metro Valencia, en el que fue FGV quien se hizo cargo de la custodia de las pruebas durante las primeras horas tras la tragedia de aquel 3 de julio. "No estamos nada satisfechos con el trato recibido de la Administración y las instancias judiciales. No ha habido justicia ni decencia con nosotros y espero que podamos acabar con un final digno". Una vez acabada la lectura del manifiesto, los congregados en la plaza han coreado al unísono el lema "Sí se puede".