El secretario general del PSPV, Ximo Puig, dijo ayer que no espera"ya nada" de la intervención del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, en el debate sobre el estado de la Comunitat porque, añadió, "es el momento del cambio". Para Puig, es "necesario" que los diputados "hagan un ejercicio de responsabilidad y den respuestas a los ciudadanos de esta Comunitat, que en muchos casos viven situaciones de angustia y de falta de horizontes de futuro".

El líder socialista, diputado en el Congreso, no es parlamentario autonómico por lo que hoy no podrá confrontar con Fabra. En su lugar lo hará el portavoz socialista en las Corts, Antonio Torres. No obstante, Puig asistirá a la sesión desde el palco de invitados y, a diferencia del año pasado, hará una valoración tras el discurso de Fabra.

Con todo, ayer "intervino" en el debate al registrar una pregunta en el Congreso dirigida al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para que se defina sobre el informe de la Comisión de Expertos nombrados por las Corts sobre financiación -que Fabra entregó ayer a Montoro- y detalle qué medidas piensa adoptar al respecto. La intención es forzar un pronunciamiento del ministro sobre el documento en el que plantea un nuevo sistema de financiación que no discrimine a la C. Valenciana.

Según Ximo Puig, el debate sobre el estado de la Comunitat debería "preocuparse de cuestiones fundamentales como la educación o la sanidad", así como "la falta de empleo para todos y el deterioro de estos derechos básicos".

EU: "Propuestas ciudadanas"

La portavoz de EU, Marga Sanz, avanzó ayer que incluirá en su intervención las propuestas y reivindicaciones recogidas mediante la campaña "#AFabralidiria. La veu del carrer al Parlament". "Hemos comprobado que los ciudadanos son coincidentes en lo que les preocupa, quieren respuestas a los impagos, los recortes en sanidad, educación y servicios sociales, y necesitan medidas contra el paro y contra la corrupción".