El Consell pretende cambiar la ley de la Función Pública -a través de la norma que acompaña a los presupuestos de 2014- para poder designar a dedo a los altos funcionarios de los departamentos de Educación, Sanidad y Justicia. El Ejecutivo ha trasladado a los sindicatos las modificaciones legislativas, que se abordarán el martes en la Mesa General. Unos cambios que incluyen la movilidad -la posibilidad de trasladar a los empleados a otros destinos- y recortes como las trabas a las reducciones de jornada sin disminución de sueldo por silencio administrativo.

Los sindicatos están dispuestos a plantar batalla ante unas medidas que ahondarán en la politización de la Administración. La reforma permitirá recurrir a personal docente, sanitario y del área judicial para desempeñar los puestos de subdirector general y jefe de servicio (los principales en el escalón administrativo) de las Conselleries de Educación, Sanidad y Justicia, obviando al personal de administración general. En Educación, además, se abre la vía para designar a los jefes de Sección, unas plazas que se ganan por concurso, esto es, por criterios objetivos. De este modo, un maestro podrá pasar a realizar funciones directivas en la Administración, reservadas hasta ahora para personal con preparación específica. El Consell también facilita la renuncia a la condición de funcionario, al fijar la aceptación por silencio administrativo.