«Es inaudito que un extranjero que no hable español, no pueda informarse en qué playa está». Para Iñaki Elustondo, especialista en Seguridad y Emergencias y uno de los impulsores del decreto ley que debía regir las costas canarias, las playas españolas mantienen un fuerte déficit de medidas de protección sobre los bañistas, especialmente en el caso de los turistas extranjeros. El motivo principal: La desinformación.

«Nosotros ya planteamos el tema de la señalización de las playas. La falta de información provoca que mucha gente se haya encontrado en situaciones desesperadas e incluso ahogamientos. Por eso, la identificación de las playas es imprescindible. Es inadmisible que venga un extranjero y no se encuentre un servicio de seguridad unificado, en condiciones. Hay más chiringuitos para beber alcohol que puestos de vigilancia», advierte este especialista, convencido de que puede haber un mecanismo económicamente sostenible con el que se mejoren las condiciones de seguridad en la costa.

«Lo que te dan las hamacas y los chiringuitos es dinero suficiente para tener un servicio en condiciones. Lo que no se puede es tener unos servicios como los de hoy en día, como los de ciertas ONG y empresas privadas, que es deficitario y no tienen puestos de socorro adecuados. Es todo un cúmulo de mala praxis, y por eso, pasan muchas más cosas de las que se informan. Las empresas y las ONG camuflan lo que ocurre porque no les interesa que se conozca lo que está pasando», reflexiona Elustondo.

En este sentido, este experto en seguridad y emergencias apunta hacia los consistorios como grandes responsables de la gestión costera en cuanto a seguridad y emergencias. «Los ayuntamientos tienen que responsabilizarse y gastarse bien el dinero en seguridad, no contratar empresas piratas por dos duros. Ellos son los que tienen que contratar al personal debidamente formado, y su cumplen se mantienen, si no cumplen, a la calle. Lo que no puede ser es encontrarte en una playa al socorrista dormido, con resaca o ligando», denuncia.

Más protagonismo del socorrista

De hecho, una de las figuras que debe ganar protagonismo en la playa, según Elustondo, es el socorrista. «Su actitud debe cambiar y ser la de un profesional que vigile y aconseje a los bañistas. A mí me han llegado a preguntar si la bandera roja significaba que el agua estaba caliente. Nunca se debe dar por hecho que un bañista sabe donde se mete en el agua. Por ello, el socorrista debe informar, estar de pie en la playa, que la gente le conozca y cuando les de una indicación, le respeten. Pero si nunca te dejas ver, apareces un día vestido de aquella manera para decir que no te puedes bañar, lo primero en loa que piensa la gente es: ¿Y éste quién es?», se pregunta Iñaki Elustondo.

De las 28 personas que han perdido la vida en las playas, piscinas y ríos de la Comunitat Valenciana en el verano de 2013, un total de 13 han fallecido en la provincia de Alicante, que ocupa el primer puesto en la lista de fallecidos. Por su parte, Valencia ha saldado el periodo estival con diez fallecidos y Castelló lo ha hecho con cinco.

Entre las playas en las que se han dado estos ahogamientos, se encuentran las costas alicantinas de El Postiguet, Pilar de la Horadada, Finestrat y Altea. En la provincia de Valencia también ha habido casos en las playas de Daimús, Canet d’en Berenguer y Alboraia, mientras que en Castelló la tragedia ha teñido las aguas de El Pinar y Alcossebre.