La asamblea de trabajadores jalonó la idea. Y la jefa responsable del informativo de medianoche del Nou 24 que iba a repetirse en bucle hasta la madrugada aprobó la iniciativa. Manu Ríos dio «libertad, total libertad» a los compañeros que a las doce de la noche se dirigían al plató tras participar en un tenso y emotivo encuentro de los empleados. El presentador, Frederic Ferri, se enganchó con el cable del micrófono y lo destrozó. Hubo que reponerlo con rapidez, entre los nervios del cámara y los lloros de algunos de los que lo acompañaban en el plató. La primera mitad del noticiario se dedicó íntegramente al cierre con especial protagonismo al vicepresidente José Císcar, cuya aparición en el Canal 24 horas de TVE fue duramente criticada. Ferri le hizo saber en directo que tenía Televisió Valenciana a su disposición para explicar su versión sobre el fin de la televisión pública. Los nervios o los duendes hicieron que parte del guión se perdiera. A falta de prompter, hubo que improvisar.

No hay movimiento asambleario sin líderes. Ayer se vio también en RTVV, donde los responsables de Programas tomaron el timón de la redacción para sacar adelante la emisión especial en defensa de la televisión autonómica. En los pasillos y en el control del estudio 3 de Burjassot se vio a Joan Miquel Llopis dando instrucciones sobre la realización del programa que comenzó a las 15.30 horas y se extendió hasta más allá de las 23.00. «Abrir nuestra pantalla a la sociedad», es el mensaje que lanzaba ya a primera hora de la mañana un grupo de periodistas y era aceptado sin necesidad de votar.

A ello se dedicaron «sin coordinadores ni gestores», afirmaron miembros de la redacción de Nou a este diario. Autogestión al poder. La jefa de informativos, Esmeralda Velasco, quedó en un segundo plano, como el resto del equipo directivo de Rosa Vidal, ante la «reacción espontánea» de la plantilla. Incluso llegó a circular en la empresa que algunos habían solicitado formalmente su destitución y la constitución de una comisión gestora.

Hubo declaraciones de empleados a favor de actuaciones en la pantalla más contundentes. Frente a ello, el comité de empresa llamó reiteradamente a la calma e insistió en la necesidad de mantener las emisiones y dar ejemplo de profesionalidad, rigor y control.