­El nuevo director general de RTVV, Ernesto Moreno, ocupaba actualmente la subdirección de Gestión de CulturArts, el holding en el que se integraron los diferentes institutos culturales del Gobierno valenciano dentro del proceso de reestructuración del sector empresarial público de la Comunitat y cuyo responsable es Manuel Tomás

La extitular de Cultura Lola Johnson colocó a Moreno como «hombre fuerte» por su perfil económico y técnico en el arranque del proceso de integración del conglomerado aunque, finalmente, ocupó la subdirección de gestión cuando María José Català accedió a la conselleria y eligió a Manuel Tomás como director general de CulturArts.

Anteriormente, Moreno ya había ejercido de «controller» y gerente en otra institución de carácter cultural, el Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia, cuya intendente es Helga Schmidt. Asimismo, colaboró en otro brazo de la política cultural del Gobierno valenciano, como fue Teatres de la Generalitat, hoy dentro de CulturArts.

El nombramiento de Moreno fue hecho público ayer por la tarde por el vicepresidente del Consell, José Ciscar „tras una reunión extraordinaria del pleno„, y su designación fue publicada poco después en una tercera edición del Diari Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV). Moreno ha sido el negociador principal por la Generalitat en el ERE desarrollado en CulturArts, que se zanjó con más de cincuenta despidos tras el acuerdo con los representantes de los trabajadores. También ha estado detrás del despido colectivo en el Palau de les Arts.

Junto al director general, el Consell nombre para el Consejo de Administración de RTVV a Vicente Burgos, Lluís Bertomeu, José Serralde y Bartolomé Orozco.

Al igual que Moreno, Serralde procede de CulturArts, donde se ha ocupado de ejecutar los recortes en el área cultural de Castelló, donde reside. Su perfil es el de un técnico de gestión, equiparable al del nuevo director general.

Entre el resto de nombramientos sobresale el de Lluís Bertomeu, quien criticó que el Consell cerrará la televisión autonómica siete horas después de la sentencia. Lo hizo el pasado martes en El baròmetre de Ràdio 9. Consideró el cierre de Nou como «una debacle social» y criticó que se clausurara «en siete horas», si bien matizó después que esperaba que los «responsables políticos lo habrán madurado».

Bertomeu atribuyó la decision de Fabra a que la C. Valenciana es «laboratorio de pruebas de Montoro», en referencia a que será la primera televisión autonómica que se cierre.

«Se pierde un foco para la difusión de nuestra cultura e identidad», aseguró tras lamentar el cierre. Bertomeu responsabilizó a la sociedad valenciana de los bajos niveles de audiencia de RTVV y acusó a sus convecinos de «meninfots» porque el cierre no llevaría a grandes movilizaciones, aventuró entonces. «Ahora nos informarán desde Madrid o Barcelona sobre lo que pasa con nuestros bancos», dijo.

El nuevo consejero alabó el papel de servicio público de RTVV porque aprendió a hablar valenciano gracias a Bola de drac y a Vicente González Lizondo.

Bertomeu pertenece al ala regionalista del PP. Se integró en el partido tras su experiencia en Joventut Valencianista, cuyo liderazgo compartió con Ignasi Bellido, actual líder de Compromís en Alicante. Tras su salto a las filas populares ha ocupado cargos, nunca de primera nivel, en la Mostra de Cinema del Mediterrani, en RTVV „estuvo en el área de multimedia y asesoró a López Jaraba„ y en la diputación provincial.

Burgos es un histórico del PP valenciano con problemas en los últimos años. Miembro del «clan del agujero» con los dos Camps (Francisco y Gerardo) y González Pons, fue líder de Nuevas Generaciones.

Con la llegada de Camps a la Generalitat, Burgos „entonces marido de la concejal por Valencia María José Alcón„ fue secretario autonómico de Administraciones unos meses, hasta que pasó a la gerencia de la Fundación Jaume II El Just, de la que salió al final de 2007 tras una bronca con la exconsellera Trinidad Miró y dejando una deuda de casi 9 millones.

Orozco ha sido durante doce años jefe de prensa con Miguel Ortiz, primero en Altea, donde el del PP es alcalde y después en la Federación Valenciana de Municipios y Provincias. Hombre de confianza de Ortiz, que es vicesecretario del PP en la dirección regional.