Uno de los argumentos del Ejecutivo de Alberto Fabra para cerrar RTVV ha sido que readmitir a los 952 despedidos, como sentenció la sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia valenciana al anular el ERE, costaría 228 millones de euros en dos años. Lo mismo que construir 57 colegios o 60 centros de salud. La comparación la realizó el portavoz del Consell, José Císcar.

Adoptando esa línea argumental, los 3.180 millones depositados desde 1987 en Canal 9 equivaldrían a poder haber edificado 795 colegios (la Comunitat Valenciana tiene unos 1.600 públicos) y 840 centros de salud.

Con ese dinero, incluso, Santiago Calatrava podría haber levantado una Ciudad de las Artes y las Ciencias casi tres veces más grande, ya que esta (sobrecostes incluidos) ha supuesto unos 1.200 millones de euros.

Y todo este montante de 3.180 millones no tiene en cuenta los intereses de la "denominada deuda histórica", como dice el TSJ en su sentencia. Estos gastos han sido de 49,2 millones en 2008; 25 en 2009; 16,4 en 2010; 26,2 en 2011, y 21 en 2012. En total, casi 138 millones de euros en los últimos cinco años.