En Castelló, el gobierno de la capital de la Plana ha sido poco proclive a rectificar proyectos con contestación vecinal y sólo las sentencias judiciales le han hecho virar el paso. El Plan General de Ordenación Urbana, la declaración de Zona Acústicamente Saturada de las calles de ocio de las tascas y Lagasca o la paralización del paso del TRAM por el parque Ribalta son algunos ejemplos de actuaciones impuestas al gobierno municipal por los jueces y no por voluntad vecinal. Y la justicia ha intervenido por recursos que presentaron entidades vecinales ante la falta de respuesta del ayuntamiento.

El ejecutivo local sólo ha corregido actuaciones menores forzado por el tejido asociativo vecinal como la introducción de un bono de pago en el transporte urbano a los pensionistas, cuyo uso es gratuito, y modificó nuevos emplazamientos de aparcamientos de pago (ORA) tras las protestas vecinales.

El consistorio de Vila-real también proyectó (al igual que en el barrio burgalés de Gamonal) hace un par de años un bulevar para unir el casco urbano de la ciudad con el paraje natural del Termet, a unos tres kilómetros de distancia. Sin embargo, el coste del proyecto, algo más de un millón euros, motivó que los vecinos rechazaran este planteamiento. Finalmente, en otro Consell de Participació, se aceptó un carril bici lateral más económico.

En Segorbe, el ayuntamiento llevó ante el consejo de participación ciudadana en 2011 la posibilidad de aplazar la construcción de la plaza de toros y edificio multidisciplinar El Coliseo, que el consistorio tenía previsto construir para la realización de festejos taurinos y conciertos. Un aplazamiento que fue aprobado por unanimidad de las más de 60 asociaciones segorbinas que conforman este consejo.

El Ayuntamiento de Almassora también paralizó el traslado de la carpa de fiestas al patio del colegio Regina Violant el pasado septiembre, tres días después de anunciarlo. El PP, sin embargo, no es muy dado a rectificar en Onda, pero hay excepciones, como los resaltos de la carretera de Tales que se colocaron a principios de mandato y que se suavizaron por las numerosas protestas de los vecinos.

Información elaborada por:J. Mestre, A. Monleón, S. Gil, S. F., C. Rodríguez.