Tras varios días de presión, el Consell le ha dado la vuelta al borrador del plan hidrológico del Xúquer que ayer aprobó el consejo territorial del agua antes de la votación definitiva del día 26 en Madrid. El nuevo documento recupera la mención a la permuta de aguas entre municipios y regantes y la compensación económica de los usuarios de la Ribera, que 48 horas antes había quedado completamente descartada.

Del encuentro de ayer la Ribera sale bastante malparada. La redacción recupera el intercambio de caudales y mantiene uno de los principales caballos de batalla para la comarca, el envío al Vinalopó de 12 hectómetros cúbicos de agua de calidad que el Gobierno no explica de dónde sacará.

Esa mención al Vinalopó que tanto irritaba a los regantes se mantiene finalmente para contentar a Alicante.

En la cuestión de los abastecimientos, la reinclusión en el texto de la permuta de aguas con compensación a los regantes salva la comunidad de usuarios que puso en marcha el director general del Agua, José Alberto Comos, quien tras la retirada de esa mención había quedado en una posición más que complicada.

La presidenta de la Confederación Hidrográfica del Júcar, María Ángeles Ureña, aseguró en la reunión de ayer que quedaban abiertas las dos posibilidades en el borrador, es decir la reserva de aguas del río directamente para la Ribera o el intercambio de caudales. Sin embargo, ello deja en una incertidumbre absoluta al ente que gestiona la potabilizadora, que ya suministra agua del Xúquer, de momento a un precio políticamente correcto para salvar las reticencias.

La mención a los 12 hectómetros que se enviarán al Vinalopó se mantiene. Aunque no se dan más detalles sobre la fórmula que se utilizará para el envío, que sea una imposición de la Generalitat y de los regantes del Vinalopó preocupa en la Ribera.

Fuentes consultadas ayer explican que el envío de 12 hectómetros cúbicos no justifican de por sí la construcción de una segunda toma, pero su sola presencia genera una inquietud importante. Lo que se pretendería es ceder a los regantes aguas no asignadas, posiblemente de Bellús, para liberar 12 hectómetros que podrían salir de Alarcón y llegar a Alicante por el Taibilla.

La mención a la transferencia al Vinalopó se mantiene, según fuentes consultadas, por la presión del vicepresidente de la Generalitat, José Císcar, que también es presidente del PP en Alicante.

«No habrá segunda toma»

El concejal del PP de Alzira, Enrique Montalvá, que se abstuvo en la votación en representación de los municipios, señaló que las palabras de la presidenta de la CHJ, María Ángeles Ureña, le tranquilizaron, «porque dijo muy claramente que no se contempla una segunda toma». Montalvá admitió que se produjeron momentos de tensión cuando se trató el envío de caudales a Alicante.