La ausencia casi total de humedad en la vegetación convierte cualquier circunstancia en la que se produce un mínimo punto de ignición en un amenazador incendio. Ayer ocurrió en Caudiel, Castelló, en un hecho insólito que probablemente no provocará la apertura de una casilla propia en la estadística de causas de incendios pero que indica la situación que atraviesa el monte valenciano. Alrededor de las 11 de la mañana, una brigada del servicio de Prevención de incendios acudía a un aviso de fuego en esta localidad. Según el testimonio de un vecino recogido por las brigadas en su cuenta de Twitter, un vecino explicó cómo había comenzado todo: «Se ha oido un chasquido, he mirado y había como una bola de fuego y de repente de la bola ha salido un águila y lo ha incendiado todo». El águila resultó electrocutada en una línea eléctrica próxima y provocó un incendio en cuya extinción trabajaron durante horas varias brigadas y helicóptero. j.S. valencia.