La rápida activación del protocolo de emergencia no evitó, sin embargo, que el incidente obligara al cierre del parque durante toda la jornada «por precaución», precisamente el primer día del mes de julio, cuando la capital turística de la Ribera ya se encuentra en plena temporada alta. Las labores de inspección del alcantarillado se de-sarrollaron por lo menos hasta el mediodía y, aunque en un principio se pensaba que las puertas podrían reabrirse al público a partir de las 13 horas, posteriormente se descartó esa opción por seguridad. A lo largo de toda la mañana era constante el goteo de clientes que se acercaba hasta la entrada con la intención de pasar una jornada de diversión en el centro de ocio y que veían frustradas sus expectativas. Entre ellos, Tania, que llegaba en coche desde Valencia con amigos y familiares, para llevar por primera vez «con mucha ilusión» a sus hijas de 10 y 9 años al parque. La valenciana se vio sorprendida al ver el despliegue de medios en el «parking». «Habíamos pensado venir a pasar el día y cuando hemos visto los bomberos nos ha extrañado», decía. «Tendremos que disfrutar de las playas de Cullera», se resignaba. Según los responsables del parque, quienes no quisieron cuantificar las pérdidas económicas causadas por el cierre forzoso, se esperaba la asistencia ayer de alrededor de medio millar de turistas «aunque teniendo en cuenta que es día 1 y que muchos aprovechan esta jornada para hacer la mudanza a la playa no nos afectará demasiado», matizaban. salva vives cullera