Dos años y medio de investigaciones de los agentes del grupo de menores de la policía judicial dirigidos por la Fiscalía de Valencia ha permitido esclarecer cuatro casos de «bebés robados», dos nacidos en el Hospital General y otros dos de la Clínica Virgen del Consuelo y ha posibilitado que los hijos se reencontraran con sus madres biológicos después de toda una vida separados, según anunció ayer la Fiscal Jefe, Teresa Gisbert y la Fiscal delegada de menores, Gema García. Gisbert explicó que dos de las madres dieron en su día a sus bebés en adopción de forma voluntaria, y los registraron como hijos biológicos de las familias adoptantes, con lo que consideran que existió un delito de falsificación que ya habría prescrito.

En el tercero de los casos, se pudo localizar a la madre biológica que declaró que tras el parto le engañaron y le dijeron que su hijo había muerto; mientras que una cuarta mujer declaró que después de dar a luz le acompañaron a entregar al recién nacido y cuando volvió a recuperarlo, a las 24 horas, ya no estaba.

Las investigaciones de la Fiscalía han servido para «tranquilizar» a los denunciantes, ya que en 5 de las 8 exhumaciones realizadas se comprobó que los restos correspondían al bebé que se había dado a luz.

La Fiscalía compareció tras reunirse con el abogado Enrique Vila, representante de Asociación SOS Bebés Robados y SOS Raíces, a petición de éste por el archivo masivo de casos de presuntos bebés robados. En total, la Policía Judicial ha investigado 147 casos, de los cuales, 143 se han tramitado en la Fiscalía y otros cuatro en el juzgado. De las diligencias abiertas en el ministerio público, se han archivado 139, y 4 se mantienen operativas, tres de ellas a la espera del informe forense tras las exhumaciones, y otra cuya denuncia se ha presentado recientemente. La Fiscalía admitió que algunos de los casos archivados podrían reabrirse tras recibir nuevos datos de las familias denunciantes.