El casino Monte Picayo de Puzol (Valencia), perteneciente al grupo Cirsa, cesará su actividad el próximo mes de octubre y trasladará a toda su plantilla, unos cuarenta trabajadores, al casino que el grupo tiene en Valencia.

Según ha explicado el director corporativo del grupo Cirsa, Pablo Llorens, en los últimos tres años el casino ha sufrido una «constante disminución del número de visitantes, que ha conducido a pérdidas económicas continuadas que han hecho inviable su continuidad».

Llorens señaló que están en negociaciones con los sindicatos para acordar el cierre de las instalaciones y apuntó que probablemente sea en octubre aunque todavía no han determinado la fecha exacta.

El directivo destacó que el cien por cien de los trabajadores unos cuarenta mantendrá su empleo, ya que les han dado la alternativa de trasladarse y pasar a formar parte de la plantilla del Casino Cirsa Valencia. «Esta operación permite a la compañía salvaguardar el empleo del casino de Puzol y evitar unas pérdidas económicas continuadas al grupo», justificó.

El Casino Monte Picayo se convirtió en sala anexa al Casino de Valencia con la apertura de este último en la capital valenciana en el año 2010.

El Casino Monte Picayo se inauguró un 4 de febrero de 1979 y ha sido el gran referente del mundo del juego en Valencia y su área metropolitana. Por sus instalaciones pasaron desde estrellas de Hollywood, hasta hasta miembros de las casas reales. En 2009 celebró sus 30 años con una exosición retrospectiva que recogió objetos y fotografías de de su historia: desde carteles de las verbenas de San Juan, firmas de estrellas de cine, el primer detector de metales o la bendición del Papa Juan Pablo II a todo el complejo y a todos sus empleados.

El Casino apostó por la tecnología más puntera en aras de la seguridad contó con hasta un desactivador de bombas y el control de los accesos, con el fin de convertirse en centro neurálgico de la sociedad valenciana.

Ahora, tras más de 34 años abierto, la dirección ha decidido el cese de la actividad debido a la prolongada crisis que viene azotando al sector del juego en nuestro país.